LA “COPA JULIO PARDO”, EN EL MOURAS DE LA PLATA, EL HOMENAJE MAS JUSTO EN LAS 200 CARRERAS ATZP.

Y en el medio de la hiper dinámica actual, el ejemplo de un luchador, de un gran deportista, humilde, trabajador, eximio preparador. Hombre de Fiat de toda la vida. Julio Pardo.

Desde el Turismo de los ´70 con los inolvidables Fiat 128 donde acuñó su hombre; después uno de los pioneros del TC 2000. Y su historia y su pasión fierrera siguió.

Y ha seguido metiéndole pata en el Turismo Zonal Pista. Y en la categoría con acierto, entendieron que Julio merecía el homenaje. En una temporada de la categoría muy acotada por la pandemia, su figura sigue siendo una referencia. Es así que al cumplirse la carrera 200 de la categoría en el Mouras de La Plata, recibe su más que merecido homenaje.

Por eso, por su enorme y reconocida trayectoria, Julio era homenajeado por la ATZP.

Año 1979, Julio en uno de sus tantos podios.

La primera final cumplirá justamentecon  las 200 presentaciones, llevando el nombre de “Copa Julio Pardo”, en homenaje al mas experimentado piloto y preparador en actividad de nuestro automovilismo, que sigue con esas ganas intactas de correr y preparar sus autos como desde hace 54 años cuando hizo su debut en el deporte motor.

«La Asociación Turismo Zonal Pista (ATZP) tiene el orgullo de contarlo entre sus filas, siempre aportando su experiencia y sabiduría para deleitarnos con su presencia. Por eso se lo siente como propio, mas allá de que es patrimonio del automovilismo todo, porque la historia así lo dice y por ello el reconocimiento», hicieron saber desde la Asociación.

Arriba del Spazio en su momento actual, hombre de Fiat de toda la vida.
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“Estoy mas que agradecido por el reconocimiento de parte de la categoría, en una carrera especial como es la número 200 que se cumple. Es muy extensa la lista de personas que a lo largo de tantos años, me han ayudado a manifestar esta pasión de trabajar y ser parte de las carreras, desde arriba y desde abajo del auto como desde hace 54 años», comentó Julio.

Con la nobleza que siempre lo marcó, como hombre agradecido apuntó Pardo: «En primer lugar el agradecimiento para la categoría por la distinción, y ni hablar de mi familia, mis hijos y nietos que siempre me apoyaron y lo siguen haciendo, para que mientras tenga ganas pueda estar disfrutando de hacer lo que hago. A ellos, a los que siempre me dan una mano para trabajar en el auto, a los que lo hicieron en otro momento y a la actual dirigencia de la categoría gracias, muchas gracias por tenerme siempre presente y darme esta oportunidad de sentirme reconocido por todo lo hecho en tantos años yn con tanta pasión”.

A los juveniles 80 años, sigue siendo ejemplo de deportividad, entusiasmo y sabiduría. Un gran tipo, Julio.

En TC 2000 con un Regatta en 1994 (Foto gentileza Alejandro de Brito).
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