LA VERDAD DE LA MILANESA quedó expuesta con apenas tres Grands Prix. El morocho de Stevenage se comió literalmente al rubiecito de Mónaco.

La historia de la Fórmula 1 2014 fue, más o menos, ésta: Nico Rosberg era más rápido que Lewis Hamilton en la clasificación (le ganó 11 a 7 y terminó el año con tres poles consecutivas) pero el inglés se mostró luego superior en la carrera (el 11 a 5 final en triunfos así lo atestigua), y aunque Hamilton ejerció una leve supremacía en la tabla de posiciones sobre el cierre del torneo, no fue sino hasta la última cita del año, el histórico GP de Abu Dhabi (porque será la única carrera de la historia de la F-1 que haya administrado doble puntaje…) que se decidió la posesión de la corona. Habían transcurrido 19 Grands Prix para ello.

 

Hamilton siempre delante de Rosberg. Y del resto, salvo excepciones, también...

 

Este año, en cambio, la ecuación es distinta y no solo porque el dominio de Mercedes vino a ser provocado por la aparición más o menos competitiva de Ferrari (y de Sebastian Vettel en mayor medida que Kimi Raikkonen) sino porque el duelo interno parece estar decidido.

A favor de Hamilton, claro está:

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En clasificación (disputadas Australia, Malasia y China)

  • Hamilton: 1°-1°-1°
  • Rosberg: 2°-3°-2°

En carrera

  • Hamilton: 1°-1°-1°
  • Rosberg: 2°-3°-2°

Con tres carreras disputadas en 2014

  1. Rosberg: 61 puntos
  2. Hamilton: 50 puntos
  3. Hulkenberg: 28 puntos

Con tres GGPP en 2015:

  1. Hamilton: 68 puntos
  2. Vettel: 55 puntos
  3. Rosberg: 51 puntos


LW está ahora, siempre, delante de NR. En clasificación y en carrera. Mercedes dejó de tener, claramente, dos pilotos al mismo nivel. Lo reconoce hasta Niki Lauda, asesor deportivo en la escuadra campeona del mundo. En este momento no hay equivalencias.

 

La irrupción de Vettel desestabiliza más a Rosberg.

 

Mala noticia para los fanáticos, pero especialmente para el piloto alemán, que se quejó amargamente tras el GP de China, acusando a su compañero de trabajar para él y no para el equipo (y luego Hamilton reconoció que ese punto de vista era válido, cuando antes había dicho que no era trabajo suyo ocuparse de Rosberg) y que precisó cierta defensa de Mercedes para recomponer el honor.

“Seguro que Hamilton manejó de manera egoísta, pero así son estos chicos… yo los llamo bastardos egocéntricos” dijo Lauda, nunca excesivamente cuidadoso con sus declaraciones. “Pero esa es la única manera de ganar un campeonato. Siempre fue así. No hay amistad en la pista, los pilotos tienen que pelear, y cuando algo no les gusta, se bajan y hacen declaraciones calientes”.

Pero acaso peor noticia es lo que hay implícito en una de las últimas declaraciones de Toto Wolff, el DD del equipo: “No tenemos la misma ventaja del año pasado dónde podíamos dejar a nuestros pilotos presionarse entre sí hasta el final”. Leída entre líneas: los nuestros no pueden pelearse. ¿Ordenes de equipo? Difícilmente. Pero tampoco un escenario de desestabilización.

Algunas versiones venidas desde Europa sugieren que lo que tiene mal a Rosberg es el problemático embarazo de su mujer Vivian, que espera al primer hijo de la pareja. Como sea, no es sencillo encontrar otra situación en el pasado reciente del equipo en el que el alemán estuvo tan en desventaja: ni siquiera cuando su compañero era Michael Schumacher…

¿Se habrá terminado ya el Mundial?

Por P.V.

Fotos: Pirelli 

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