Y FUE PARA AGUSTIN CANAPINO.

A contramano de lo que sucede en las películas, el “villano” le ganó a al “muchachito” protagonizado por Facundo Ardusso. El mismo que salvo el obvio deseo de los hinchas “chivos”,  era el preferido del resto de los seguidores del TC. Porque además de gran piloto, es sencillo, humilde y abierto a la gente. También porque  era el principal referente de una marca Torino, ligada  al corazón del tuerca.

 

El momento clave de la final. Canapino supera a Arduso e inicia su escalada. Allí comenzó a definirse el título en favor del arrecifeño.

 

Todo muy lindo, pero ganó ese ”villano” que interpretó Canapino, con una personalidad totalmente distinta , y que deportivamente comenzó a agrandar su amenaza en las últimas carreras con esa atropelladas en su incontenible Chevrolet. Así cuando más lo necesitaba, primero en Comodoro Rivadavia, y en la definición en el Mouras, apareció ese temple especial que distinguen a los grandes campeones para ganar coronas que parecen inalcanzables.

Así parecía ésta del TC con un Ardusso, líder del campeonato largando por delante de Canapino, en un circuito muy complicado para los sobrepasos. Facu sólo pudo aguantarlo en la serie. En la final le duró apenas 4 vueltas antes que. empujado por la necesidad de superar al menos cinco autos más, Canapino fue por más. La gran especialidad de Agustín. Así quedaron atrás, Urcera, Josito (con algún roce), Ugalde y Lambiris, éste por el pase y siga por el toque a Mazzacane del que el uruguayo retornó muy rápido y delante de Ardusso en una instancia que también  sería clave para la definción. Quedó como escollo final  un relevante Alan Ruggiero. Y encima sobre un Torino.

Canapino concreta el sobrepaso a un áspero Ruggiero, que lo llevó al cuarto puesto y a la conquista de su segundo título en el TC.
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“El Canapino del 2010 (temporada del primer título en TC con 20 años) se hubiese desesperado y tal vez habría cometido un error”,  reconoció Agustín marcando la diferencia con este Canapino versión 2017, que no se equivocó y pese a la aguerrida resistencia de Ruggiero, mayor a la que le opuso Ardusso, pudo subir el escalón que le faltaba con una precisa maniobra. Sólo quedaba una vuelta y media. El final, con Canapino cuarto y Ardusso estático en el decimo puesto «resguardado» por Okulovich, lo consagró por apenas 0,25 puntos, la menor diferencia en la historia del TC.

Nada hay para discutir sobre esta consagración de Canapino. Dejó la imagen de verdadero campeón, por su permanente ir al frente, y el contundente andar del Chevrolet del Jet Racing atendido por su padre Alberto y motorizado por Fernando García, el preparador así tuvo una feliz despedida del equipo (deja el automovilismo, se va a vivir al sur). Nada que ver con la  permanente actitud  defensiva de Ardusso, motivada por un Torino que desde que el viernes pisó el Mouras nunca se encontró cómodo con una permanente ida de cola. Lo reflejó Facu con un rostro permanentemente ganado por la preocupación, como si intuyese el triste final.

El regreso de Lambiris a pista tras el pase y siga por el toque a Mazzacane. Otro punto clave porque retornó delante de Ardusso y le quitó una posición que fue determinante para la definición del título.

Surgen en cambio muchos cuestionamiento sobre este título que se le escapó  a esos grandes candidatos que eran Ardusso y el Trotta Competición, cara visible de Renault en este regreso al TC con los Torino de Facu y Emiliano  Spataro. Uno de los primeros es aquel triunfo que en Rafaela le birló Spataro, su compañero de equipo en circunstancias poco claras y que le quitó 6 puntos que hubiesen cambiado el destinatario del título. Fácil es decirlo con los hechos consumados como inevitable es su recuerdo. “No quiero pensar en eso, porque tal vez si ganaba en Rafaela no ganaba, como gané en Toay” explicó Facu en medio un desconsuelo por la gran oportunidad perdida (“un  título de TC no se pelea  todos los años” ), que se notaba en su rostro sin que esto le impidiese tener la amabilidad acostumbrada.

Asimismo a la hora de analizar causas habrá que detenerse en la falta de reacción de un equipo del nivel que representó  oficialmente a Renault en su regreso a la categoría, para sobreponerse al mal funcionamiento  que desde el viernes mostró el Torino número 5. Es cierto que el equipo nunca había corrido en el Mouras, a diferencia de las muchas horas que acumulaba el equipo de Canapino,  pero desde el arranque del campeonato se sabiá quo en la pista platense iba a decidirse la corona.Tambíén este este caso,  el don de gente de Facu , salvó responsabilidades al señalar que “el equipo trabajó con todo e hizo muchos cambios, pero nunca se pudo avanzar en el rendimiento del auto.”  

El ganador Julián Santero festeja en el podio, acompañado por su escoltas Ledesma y Mazzacane.El mendocino cerró el año como lo empezó en el TC: con una victoria sobre el Torino.

 

Finalmente queda por analizarl el papel de Ardusso. “Estoy triste, pero tranquilo porque dejé todo”, dijo a Visión mientras la otra cara de la definición se  veía a pocos metros con Canapino llevado en andas. Es cierto, Facu hizo lo que pudo con el mal auto que tenía, y un equipo falto de reacción incluso para jugar la carta de un reclamo por alguna posible irregularidad (tránsito a mayor velocidad de lo permitido) en el pase y siga de Lambiris. Quizás Facu pudo haber hecho un poco más en la defensa de su puesto con Canapino, porque que en definitiva era la gran cuestión de la carrera. “Siempre corro así y no voy cambia mi forma de correr por un título” argumentó .

Se entiende Facu, como también hay que entender que esa “maldad deportiva” que por su personalidad le falta a Ardusso, es parte del manual de los campeones.Una «maldad» deportiva que no siempre significa chocar al rival.

 

Por Miguel Sebastián

Fotos:  AIF

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8 COMENTARIOS

  1. No falto «maldad deportiva». Falto un ingeniero de pista que mejore el auto. Que se jugara con cambios grandes!!! El auto una babosa todo el fin de semana. El de Ardusso fue el peor Torino. Y debio enfrentar a Canapino que fue el unico que supero auto en pista. Sin dudas, Canapino padre, un capo total.-
    A Ardusso no le falto maldad deportiva, sino personalidad para exigir y asumir cambios. Es facil echar la culpa al equipo.
    Pregunto algo porque no lo repitieron por TV: Lambiris lo toco a Mazzacote? O hizo un trompo sòlo?
    Con semejante auto, apuesto que Clemente es campeon 2018.

  2. Para ser CAMPEON no hay que ser pecho frío!!!! Canapino empezó aganar el titulo en COMODORO RIVADAVIA, lo doblegó mentalmente a ARDUSSO y esto todos lo saben.
    Además, la diferencia de 0,25pts es MENTIROSA ya que si OKULOVICH lo superaba a ARDUSSO, CANAPINO SALIA CAMPEON POR ESCANDALO. La verdad que no sabia que OKULOVICH ERA PILOTO TORINO-RENAULT, lo que no hizo SPATARO, lo hizo el misionero…Carlitos, lo salvó del PAPELON a FACUNDO…
    PARA SER CAMPEON HAY QUE IR AL FRENTE Y QUE LA CUENTEN COMO QUIERAN!!!!

    PD.: ARDUSSO, NI EN LA TECNICA PUDISTE SALIR CAMPEON. BUSCATE UN PSICOLOGO!!!!

  3. EL TITAN se lo merece, luego de una magra clasificación supo recuperarse pasando autos como nos tiene acostumbrado sin que nadie le regalara nada, a puro manejo.
    En cuanto a Ardusso, se dio lo que se preveía (remontarse a mi comentario del 09-10-17 sobre vuestra nota PORQUE EMI NO LO DEJO PASAR AL FACU ) : ahí se perdió el campeonato-así de simple- ahora de nada sirven los lamentos, en el automovilismo no se regala nada, lamentablemente el equipo no lo cuidó, un campeonato no se gana todos los días y menos la marca Torino que en esta oportunidad lo hacía como oficial a pesar de sponsor distintos.
    Recdordar que un millón siempre vale menos que un campeonato.
    Espero que el grupo familiar y sus amigos levanten el animo de Ardusso, para que pueda encarar de la mejor manera el campeonato del super tc2000.
    Gracias

  4. Arduzzo en rafaela la perdio el la carrera llendo a 2 por hora ganando, igual que hizo ayer toda la carrera con una vergonzosa manera de okulovich de cuidarle la espalada….asi no se gana un titulo de tc!!! por otro lado, el equipo del torino nunca supo aprovechar la ventaja reglamentaria que tienen este año, no podes tener una ida de cola todo el fin de semana con el bruto aleron (atrasado para este año)….que tienen los toros…
    En contra posicion, alberto canapino, un grande de la preparacion, exprime los reglamentos como pocos, me alegro mucho como hincha de la marca y por la flia canapino!!!

  5. Estoy de acuerdo con Leonardo y Oscar.., el titulo se comenzo a perder en Rafaela…, pero lo que más me llama la atención era que los Torinos «particulares» (no solo en La Plata) andaban mejor que el de Ardusso…, (Di Palma gano tres), de hecho gano un Torino…., el otro «oficial», el del «dueño del equipo»se arrastraba no podía servir de apoyo lo que hubiese sido lógico…, recibio ayuda del Misionero Okulovich «particular». Por otra parte me parece que no le encontraron la vuelta al chaisi y a la ventaja reglamentaria quizas por desconocimiento por ser nuevos en el TC esto que es usado como excusa no me la creo.
    Agustin Canapino es un justo ganador…, gran piloto y sapiencia técnica el padre, yo por lo pronto voy a tener que esperar otros 46 años…!!!!! no llego…, que lo pario mendieta.

    • Amigo lector:
      Los campeonatos que generalmente ganan los «malos», son aquellos que necesitan de alguna manobra extrema de parte de su protagonista. Recordar como ejemplos algunos de los de Schumacher, Prost y Senna por citar casos en al Formula 1.
      Sin desmerecer para nada su merecido logro, su capacidad conductiva y calidad humana, en este caso Ardusso tenia todoa favor para ser campeón y simplemente cumplió con la misión con inteligencia y sin cometer errores. Dos virtudes de esta clase de grandes campeones que integra Ardusso.
      ¿Se entiende ahora?

      Saludos

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