ESTOS NO SON LOS HERMANOS «MACANA», DE LOS GENIALES «AUTOS LOCOS».
Son los Bonelli y a mucha honra dirán. Laboriosos, muy dedicados, gran capacidad de trabajo; capacidad frente al volante de un auto de carrera y a la hora de meter mano para que anden lo más rápidos posibles.
Son jóvenes aún, entrerrianos de Concepción del Uruguay y por sus venas, aunque suene a frase hecha, «corre sangre teceísta». Son Nicolás, Nico; y Próspero, el Pope. En Rafaela, en la clasificación para la primera fecha de las cinco decisivas de la Copa de Oro, con formato inusual por imperio de las PASO, fue la hora de Nico en el Ford.
«No me sorprendió la pole, veniamos andando bien; en la anterior en Posadas pude terminar bien de no haber sido por la rotura de uno de los resortes de válvulas. Y en Rafaela el auto anduvo bien de nuevo. Síi, es muy especial hacer la pole en Rafaela, un circuito tan rápido, tan tradicional. No todos los días es posible hacer una pole en el TC, por eso la disfruté mucho», contó Nico a visión.
Y vaya, la segunda pole conquistada siguió a la primera lograda también en la pista santafesina cuatro años atrás, en 2017 un 7 de octubre, «sí, en Rafaela más allá de la gran satisfacción personal, hacer el mejor tiempo no es tan clave como en otros circuitos, porque se dan muchos intercambios de posiciones, pero bueh!, la hice yo, ja!», remarcó.
El sábado por la tarde, iba a comprobarse o no lo arrojado en la clasifica donde, el escolta de Nicolás fue uno muy necesitado de resultados, Santiago Mangoni, adelante de Manuel Urcera, ambos del Chivo. «No pude entrenar por un problema en el auto, después para clasificar pusimos las gomas nuevas y el auto rindió bárbaro. ¿Por que quedamos adelante Bonelli, yo y Urcera?, no sé, anduvimos muy bien y quizá pudo incidir que circulamos con la pista limpia y luego se fue ensuciando», relató el balcarceño aferrado al soplo de aire puro disfrutado.
«Y sí, no vinimos teniendo un año nuevo, decidí rearmar mi equipo propio; si, sí, pensado a largo plazo, esperemos que los sponsors con los que hablé de los objetivos del proyecto nos sigan acompañando, sin dudas las cosas no están sencillas», admitió Santiago al conversar con visionauto. Y cuando le recordamos sobre su paso por e JP Carrera adonde llegó para ocupar el lugar de alejado Guilllemo Ortelli (por falla en el motor rafaelino, de nuevo por el fondo). El de Salto, justo, meses después volvió y su reingreso marginó a Mangoni. «Y… (hizo una mueca de desconcierto), no sé que pasó. Yo llegué al JP creyendo que era un paso a largo plazo, no anduve mal, puse todo de mi parte pero un día, no recuerdo como, me enteré que me había quedado sin auto. Me costó entenderlo un poco, habían creído en mí y de golpe dejaron de creer…».
«Hice un trompo porque me pasé, séptimo fue bueno y sin chuparme con nadie. En Rafaela todo puede pasar», explicó sobre su lugar Agustin Canapino, el Titán arrancó la Copa al frente en el puntaje producto de haber ganado la etapa regular. Andrés Jakos y el Tubo Gini completaron los 10 primeros de la clasifica. El resto clasificado a la Copa: Gastón Mazzacane 11°, Mariano Werner 13°, Leonel Pernía 14°, Josito Di Palma 17°, Mauricio Lambiris 20°, Marcelo Agrelo 23°, Joinatan Castellano 24°, Juan Pablo Gianini 31° y Marcos Landa 32°.
En TC Pista al frente el de Pilar, cuyo taller modelo se encuentra en Parada Robles, partido de Exaltación de la Cruz. Es Martín Vazquez (Dodge), anduvo a 192,028 Km/h. Luego Santiago Álvarez, Hernán Palazzo, Ian Reutemann.
Nico Bonelli, Santiago Mangoni, Vazquez. Trabajadores al poder!
Fotos: ACTC