DUDAS CON LA GOMAS.
Histórico. Exigente. Desafiante. En estos tres puntos coincidieron la mayoría de los pilotos del Top Race al definir la propuesta del Autódromo de Nueve de Julio como tercera escala del campeonato. Un trazado que buena parte de los corredores transitan por primera por esa lamentable orfandad en que fue dejado el escenario bonaerense al no poder adaptarse a las nuevas exigencias del automovilismo. Como ejemplo valga señalar que con su anterior paso en diciembre del 2019, el Top Race había sido la última de las categorías nacionales que lo visitó. Ahora vuelve a quebrar el silencio de ruido con nivel nacional
A estas características de novedoso y exigente, la pista de Nueve de Julio sumó una presencia, generalmente no muy bien vista: la lluvia. Y encima una lluvia más molesta que intensa, que no se decidió a pasar de la llovizna al chaparrón y que sembró dudas a la hora de la elección de los neumáticos ¿Lisos o con dibujo? fue, cómo es habitual en estos casos, la cuestión, y no resultó sencillo decidirla.
Frente a este panorama era cuestión de tener paciencia, armar una buena estrategia y contar con el necesario aporte de la suerte para pensar en un buen resultado. Marcelo Ciarrocchi dispuso de todos estos factores para quedarse en la decisiva tercera y última tanda clasificatoria con el mejor tiempo por segunda vez (había marcado la pole en la fecha inicial en el Gálvez) en la temporada.
Ciarrocchi tuvo paciencia y supo esperar para salir en cada tanda en el momento justo en una aceitada estrategia para no desgastar los neumáticos ancorizados que eligió. Y tuvo suerte que esa elección no dejase de ser la correcta al mantenerse mojada la pista. “Era un tiro por cada tanda y lo pudimos aprovechar” contó Ciarrrochi sin olvidar el elogio a su equipo, el Lincoln Motorsport, por el gran rendimiento de su Ford.
Esa paciencia, estrategia y suerte que acompañaron a Ciarrocchi no la tuvieron la mayoría de sus rivales.”Tengo un auto bárbaro, pero la erré yo al quedarme demasiado en la pista y calentar las gomas” lamento Facundo Aldrighetti, tercero por detrás de Gastón Rossi. “En la parte final cayó el rendimiento de la goma” explicó Josito Di Palma sobre el problema que lo relegó al cuarto puesto, cuando parecía “comerse a los chicos crudos” tras dominar las dos primeras tandas clasificatorias. Y menos mal que le hizo caso al equipo y contra su idea de poner neumáticos lisos, salió a clasificar con gomas ancorizadas. Estaba claro que la pista no estaba para lisas. El campeón Diego Azar la desafió y puso las lisas. No entró en la tanda decisiva y quedó octavo. Admitió su error,
También la paciencia, la estrategia y la suerte tendrán papales fundamentales en el tramo final de esta fecha. Son dos carreras de 20 minutos mas una vuelta cada una, con la obligación de pasar en una de ellas por boxes para recargar 15 litros de combustible. Una exigencia especial propia de una fecha especial como lo es ésta ue reenuentra a Nueve de Julio con la actividad nacional.
