ADMITE LO QUE VE TODO EL EL GP DE MÉXICO EN CURSO, Y EN MUNDO DE LA F-1. EN EL CENTRO DE LA ESCENA Y CON SU EQUIPO RED BULL Y MAX VERSTAPPEN EN LA MIRA.
Sergio Pérez ha transitado la temporada más difícil desde que llegó a Red Bull en 2021. Lo reconoce. Y la razón más importante, es que no logró extraer el máximo provecho al auto, debido a las modificaciones volcadas en su auto durante el campeonato 2023.
De cualquier forma, Checo se ubica segundo en el campeonato con 240 puntos, secundando a Max Verstappen, consagrado en forma anticipada, tricampeón de Fórmula 1. En tanto, Lewis Hamilton de Mercedes, tercero (201 puntos), y ante la posibilidada de seguir acortando la ventaja en el puntaje que le lleva el mexicano.
En el Autódromo Hermanos Rodríguez, ante sus compatriotas en multitud, afronta una carrera donde ocupa el centro de la escena y de las miradas. Así como el equipo Red Bull, Verstappen, Helmut Marko, Cristian Horner, vistos como quienes le patearon en contra a Checo.
«Sí, ha sido la más complicada temporada, no es fácil, la gente nunca entenderá lo qué es manejar un auto a 300 kilómetros por hora y no sentirte cómodo, no saber lo que va a hacer el auto en una curva, solo el piloto lo siente y creo que eso fue lo más complicado», ha dicho Checo.
«Tenemos un gran auto, de todas maneras, noto que cada vez es más difícil sacarle el máximo por los ajustes hechos por el equipo, y eso ha hecho que sea una temporada muy compleja, con muchos altibajos, malos y buenos momentos durante el año, por eso sí diría que ha sido la temporada más difícil mentalmente», se le escuchó admitir.
En 2023 ha ganado con Red Bull en Arabia Saudita y Azerbaiyán, y visitó el podio en Bahrein, Miami, Austria, Hungría, Bélgica e Italia. «Como piloto -señala-, cuando uno tiene temporadas difíciles sabes que puedes sacar el máximo del auto, pero el año actual para mí no fue así, siempre tuve en ciertos momentos dudas respecto al auto. De todas formas, la situación pasará y nos quedaremos con los buenos recuerdos, hay que disfrutar todo porque pasa muy rápido».
Checo, de 33 años, en medio de la supuesta «interna» en Red Bull, prioriza convertirse en el primer piloto mexicano en ganar en F-1 en su país. «Es un momento que sueño toda mi vida, el que más quiero ganar, irme con un triunfo en casa sería el Gran Premio más especial e inolvidable. Me enfoco en ser cada vez mejor piloto, creo que hemos progresado mucho y debemos demostrarlo en casa.el fin de semana».
Foto gentileza: Excelsior.com.mx