LAS LUCES FULGURANTES DE LAS VEGAS, EL MARCO INIGUALABLE.
A dos grandes premios de la culminación del Mundial 2024 de Fórmula 1, Max Verstappen lo consiguió por fin: Se consagró campeón del mundo por cuarta vez, el más trabajoso al cabo de una temporada altamente competitiva, en la que arriba de su Red Bull debió resistir en la última parte del año, ante la caída del rendimiento de su auto y el nivel en alto de McLaren, Ferrari, y algo de Mercedes.
DE CAMPEÓN A CAMPEÓN. ALONSO FELICITA A VERSTAPPEN POR SU CUARTO TÍTULO.
Lo de Mercedes en Las Vegas inmejorable, ganó con nitidez George Russell y Lewis Hamilton completó el 1-2, en tanto Carlos Sainz volvió a lucir con la Ferrari, tercero iniciada su despedida del Cavallino Rampante, cuarto su compañero Charles Leclerc y, Max, el quinto lugar le alcanzó para volver a erigirse en campeón del mundo.
El apartado especial para Franco
Al cabo de un fin de semana altamente estresante ante el piñón en la clasificación, Colapinto se reseteó, mostró la gran actitud ostentada al manejar, reapareció su consistencia uno de sus grandes atributos y terminó 14º. Y lo logró después de largar último desde los boxes, debido a las muchas reparaciones obligadas por los serios daños sufridos en su Willliams por el golpazo clasificatorio. Un resultado con mucho valor, ganò seis posiciones, ante el contexto que lo rodeó.
Aún sin olvidar el revés sabatino, que lo shockeó desde lo mental, Franco hizo su propio análisis cuando habló con ESPN. «Fue duro lo del sábado, una lástima, el auto muy dañado, una pena. Podría haber pasado a la Q3, tenía un auto sólido pero no pude ir lo rápido que quería por otros autos en pista y cuando lo intenté, salí de la curvaa 16 muy, muy al límite para intentar entrar a la Q3 y salió mal».
«En la carrera me complicó mucho la ida de cola del auto, se movía mucho atrás, luego se fue acomodando, mejoró y pude andar más cómodo, a diferencia de la clasificación, arriesgué y me salió bien. Me gustan los callejereros, pasar cerca de las paredes aunque no tanto como en la clasificación, je! El golpe fue fuerte, quedé medio bobito, medio drogado cuando m baje del auto. Después del equipo hizo otro trabajo increíble para reparar el auto, hay que hacerle una estatua a estos pibes (los mecánicos de Williams)».
Recobrada la vertical, Colapinto afronta en días el GP de Qatar, como afirmó, «con la cabeza en alto». luego de la destacada remontada. Aunque lejos de los puntos, el argentino demostró temple y fuerza interior para superar el difícil momento, más aún en un circuito urbano alamente demandante..
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