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LA RESPUESTA ES SÍ. PERO NO PODRÁ SER CAMPEÓN MUNDIAL

¿Cómo se explica?

José María López sigue participando del Mundial de Endurance (WEC) y acaba de lograr el triunfo en las 6 Horas de San Pablo, conduciendo un rato largo (2 horas y 20 minutos a lo largo de 84 de las 216 vueltas de la prueba), el Lexus R FC GT3 del equipo ASP del exLeMans Jerome Policand. Después de un año y medio de frustraciones con este coche, el cordobés pudo llevarlo a la victoria, y con ello subió varias posiciones en el torneo.

Pero como el cordobés participa en la clase menor del WEC, la LMGT3, el torneo de pilotos de la clase no tiene status de campeonato mundial, sino de trofeo. De manera que, aún si llega al final de año al tope de las posiciones, no se le acreditará un sexto título mundial que se sume a los dos que ya tiene en la categoría, con el Toyota LMP1/Hypercar, y a los tres del Mundial de Turismo (WTCC) logrados entre 2013 y 2015.

¿Por qué un año y medio de sufrimiento? En esta circunstancia, y ubicado como piloto de desarrollo, López debió compartir el auto con al menos un piloto Bronce (en 2024 fue el japonés Takeshi Kimura, este año el rumano Razvan Petru Umbrarescu) que no siempre fueron los más fiables compañeros.

Kimura era seis a siete segundos por vuelta más lento que López; Umbrarescu este año no llegó a entregar el auto a sus compañeros en dos de las tres primeras competencias del torneo, aunque mejoró en Le Mans y con el conocimiento del argentino de la carrera y sus circunstancias lograron alcanzar el quinto lugar final.

El equipo, debutante en 2024 en el WEC, tuvo que trajinar duro para entender las características de la Vieja Señora, el Lexus que vio la vida en 2017 y clama por un reemplazo que llegará recién en 2026. Y para esta carrera paiulista, tuvo una prodigiosa e inesperada ventaja.

El reasfaltado del escenario de Interlagos presentó un piso sin mucho grip, en el que era muy difícil introducir los neumáticos en su temperatura ideal de trabajo, especialmente porque, dadas las características abrasivas de la pista, el fabricante norteamericano de cubiertas que abastece a la clase LMGT3 estrenó un compuesto duro, el único tipo de caucho disponible para la carrera. En ese panorama, los autos con motor delantero alcanzaban más rápidamente la temperatura ideal de las cubiertas. Por una vez, el Lexus estaba en condiciones de pelear la carrera.

“Con esta goma dura, Goodyear nos hizo un regalo”, sentenció Policand. “Y nosotros nos preparamos bien para su debut en competición. A pesar del peso del coche. especialmente en el tren delantero, nos permitió mantenernos competitivos a lo largo de la carrera”. Exactamente como se preveía.

Perdieron la pole contra el Aston Martin Vantage (de motor delantero) de Eduardo “Dudu” Barrichello, el hijo de Rubens, que vive a 20 minutos del circuito y conoce sus secretos como pocos. Pero esta vez fue el brasileño quien sufrió a su piloto bronce, el norteamericano debutante Anthony McIntosh. Umbrarescu le arrebató la  punta en la vuelta 12 (foto inferior) y el Lexus 87 no la abandonó salvo en los pits. Ni siquiera una penalización que le impusieron a López, por excederse en la velocidad máxima en boxes, los hizo caer en el marcador. McIntosh entregó el auto en la undécima posición y a Barrichello solo le alcanzó para el escalón más bajo del podio.

Uno de los problemas del Lexus era el desgaste al que sometía a sus neumáticos en condiciones normales, lo que provocaba que en el segundo stint de cada piloto, con el mismo juego de cubiertas, los tiempos se desplomaran. López se frustró en más de una ocasión en ese sentido.  Pero el fabricante atendió ese problema: “No las diseñamos para que dure más sino para que sea más consistente en los tiempos a lo largo de múltiples stints”, dijo un vocero de la marca de Akron, “para que los pilotos marquen tiempos más rápidos en su segundo stint, ya que las gomas conservan su performance”.

Eso se reveló en carrera: López marcó su mejor vuelta, 1m34s725 en el giro 70, cuando solo llevaba cinco al volante; pero en el giro 201, cuando su segundo stint llevaba ya seis giros, marcó 1m34s931, apenas dos décimas más lento que su mejor vuelta.

La mejor vuelta de cada piloto:

  • 1m34s725 (López)
  • 1m35s184 (Schmid)
  • 1m36s249 (Umbrarescu)

Ese 1m34s725 fue la segunda vuelta más veloz de la carrera; el record, 1m34s463, lo marcó Barrichello cuando corría en procura del podio.

Fue la primera vez que López se subió a un podio del WEC desde el segundo lugar absoluto en las 24 Horas de Le Mans del 2024. “Ha sido un largo viaje con este equipo, desde el comienzo, desde cero, con un auto que ya tiene sus años”, rescató el cordobés. “Esta había sido nuestra peor carrera el año pasado, de la que aprendimos mucho. La verdad es que no esperaba ganar aquí en Interlagos. El auto no se adapta bien a este circuito. Pero a bajas expectativas, grandes resultados. Trabajamos mucho sabiendo dónde había que hacerlo, hubo un par de factores que nos beneficiaron como la goma dura y el pavimento nuevo”.

Según Pechito, “la performance del auto este año es realmente buena. El equipo pudo sumar un podio en Spa-Francorchamps, nosotros terminamos quintos en Le Mans. El año pasado tuvimos mala suerte, golpes traicioneros. Se hizo un gran progreso, aprendiendo mucho. Desafortunadamente perdimos mucha ventaja en un momento (con la penalización) pero el auto era el más rápido en la pista, solo tuve que llevarlo hasta el final”.

Finalmente, el cordobés rescató que “este triunfo es muy emotivo para mí porque es como mi carrera local, muy cerca de Argentina. Mis hermanos estaban aquí, algunos amigos también, ha sido muy especial”.

 

Las cubiertas duras son la panacea de este veterano Lexus en la clase LMGT3. Pero, cuando faltan tres carreras para el final del torneo, solo estarán presentes en dos, las 6 Horas de Texas, en setiembre, y en el cierre del torneo, las 8 Horas de Bahrein, en noviembre, una carrera cuya clasificación general el argentino ya obtuvo en dos ocasiones. En cambio, en el circuito de Fuji, plagado de curvas lentas, solo habrá un compuesto medio.

Dos de tres: hay que aprovechar la oportunidad. Quedan 91 puntos en juego, y López y sus compañeros, Umbrarescu y el austríaco Clemens Schmid, están a 32 puntos de los líderes, los ganadores de las 24 Horas de Le Mans.

El Porsche n° 92 es el rival más fuerte en el torneo de este año, respaldado por el concurso del austríaco Richard Lietz, uno de los pilotos más experimentados en el certamen (el segundo que más carreras corrió, con 89) y seis veces ganador de su clase en Le Mans. Pero la Ferrari 296 n° 21, que no tuvo una gran actuación Interlagos, ya ganó este año, en Spa-Francorchamps, y también tiene chances de ganar el certamen.

En definitiva, para López fue su primera victoria en la clase LMGT3, que se suma a las 15 que había obtenido ya en la clase superior. Es el único piloto que hasta ahora ha logrado ganar en las dos clases actuales (Hypercar y LMGT3) del Mundial de Endurance. ¿Será, también, el primero en ganar ambos títulos?

16-7-25

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