FESTEJÓ CON TODO el equipo Peugeot y Stephane Peterhansel su triunfo en el octavo Dakar sudamericano, que por lo escuchado no será el último.
Nadie se acordó en la calurosa tarde rosarina, de las palabras de Marc Coma, el primerizo director deportivo del Dakar, advirtiendo que «la clasificación iba a ser provisional porque hay un reclamo de Mini que deberá seguir su recorrido legal…» El reclamo estuvo motivado por una recarga de combustible, que según la gente de Mini, el Peugeot de Peterhansel realizó en un lugar no permitido durante la etapa que culminó en Belén. Las autoridades de la carrera rechazaron la protesta inicial del equipo alemán que apeló la decisión.
Por lo tanto, el reclamo está y comenzará a ser evaluado por la Federación Internacional el 23 de febrero en su sede de París. Sin embargo, nadie cree que podrá cambiar el nombre del ganador de la carrera Ni siquiera, el qatarí Nasser Al Attiyah (foto), el principal beneficiado en caso de una sanción a Peterhansel ya que pasaría ser el nuevo vencedor. «No tengo nada que ver con el reclamo» aclaró el Príncipe, quien culminado este nuevo Dakar ya comenzó a pensar en su participación en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro como integrante del equipo de tiro de su país.
«Hicimos el reclamo más con la idea de que se aclare el tema de las recargas de combustible que buscando una sanción a Peterhansel. No imaginamos que una entidad con sede en París, sancione en una carrera organizada por los franceses a un equipo francés que encima ganó con un piloto francés…» escucho Visión en el campamento de Mini cuando ya empezaba la retirada de los equipos.
Realismo puro ¿no?
Por el equipo de VA
Fotos: Mónica Paz