CAMBIO DE ROLES.
Hasta la fecha anterior, en el Mouras platense, Martín Chialvo era uno de los que estaba al acecho de Marcelo Ciarrocchi, que llegaba como líder del campeonato del TC 2000. Allí arrasó con el Ford Focus que prepara la Escudería Fela, aprovechó el mal paso del cordobés y llegó a lo más alto de las posiciones tras conseguir una sólida victoria.
Ahora, en el Rosendo Hernández de San Luis, séptima cita de la temporada, será Chialvo el que deba defenderse de sus perseguidores, especialmente, Mariano Pernía, que con el Renault Fluence está a sólo 9 puntos. Tampoco puede descuidarse de Ciarrocchi, que va en busca de revancha con el Citroën C4 Lounge y al que lo separan de la cima 15 unidades. Agazapado, aparece el ascendente José Manuel Sapag, con otro C4 Lounge, a 33.
“Voy muy confiado con la victoria y con haber llegado a la punta del campeonato, también siendo conscientes de que hay que seguir siendo regulares, que falta un montón y que puede ser para cualquiera. Llego a San Luis con 50 kilos, bastante cargado así que vamos a ver cómo le caen al auto. El objetivo de mínima es estar entre los diez, sumar cada punto en el Sprint y en la final”, aseguró Chialvo.
Foto: prensa Escudería Fela y TC 2000.