No le habrán dado el mejor auto a Michael Schumacher, pero al menos le proporcionaron el mejor servicio… La escuadra Mercedes fue la más veloz en el Mundial 2010 de
La prohibición de reabastecimiento ensayada a partir de este año que se va puso énfasis en el trabajo de los mecánicos para proceder al recambio de cubiertas en las paradas obligatorias, una tarea que hasta el 2010 no era decisiva, ya que se empleaba más tiempo en la recarga de combustible. Sin esa tarea por delante, la celeridad en la quita y colocación de neumáticos pasó a ser determinante.
La operación más rápida de todo el Mundial la concretó la escuadra RedBull, cuando le hizo el servicio a Sebastian Vettel en la última vuelta de la carrera en apenas 2s9. Se tarda más en leerlo que en hacerlo…
Sin embargo, en el balance general, Mercedes dispuso de la dotación más veloz para la misión en ocho de los 19 Grands Prix de la temporada: Malasia, China, España, Mónaco, Turquía, Inglaterra, Alemania y Bélgica.
La clave del éxito radica en un sistema automático de salida, basado en electrónica y luces dentro del cockpit, que le da vía libre al piloto de manera más decisiva que el “lollipop” (chupetín en inglés), la pancarta que detiene o autoriza el paso, accionado de manera manual por un mecánico de ingentes reacciones.
Los equipos pueden usar hasta 15 mecánicos para la frenética tarea: tres por neumático, dos que accionan los gatos, y el encargado de la pancarta. En promedio, las mejores maniobras de recambio demoran alrededor de cuatro segundos.
RedBull, que todavía utiliza el “lollipop”, fue más rápida en Bahrein, Australia, Hungría, Italia y Abu Dhabi. Cinco GGPP en total. El mecánico que da el vía libre se elige después de un examen psicológico que se le practica a todos los que pueden tomar parte del pit-stop, quienes se entrenan durante el invierno, mientras el equipo termina de construir los autos.
Ferrari se impuso en tres, Sauber en dos y McLaren –tradicionalmente un equipo cercano a la perfección en operaciones– solo en una ocasión, en Japón. La peor performance de todas ha sido la de Lotus, con cinco Grands Prix siendo la escuadra más lenta de todas. ¿La sorpresa? Renault ocupó ese dudoso lugar en cuatro carreras.
7/12/2010