LA EMOCIÓN, Y EL GUSTO, DE LA PRIMERA VEZ.
Pudo sorprender doblemente el debut como poleman en el TC Marcelo Agrelo, sobre el Torino del Maquin Parts. Porque el nacido en Rada Tilly, Chubut, hace 31 años, no suele ser de los que se tenían en cuenta a la hora de los grandes protagonismos. Y porque como bien reconoció, venía de días difíciles tras ser involuntario causante del fuerte choque de Manuel Urcera en la anterior carrera de Toay, que dañó seriamente el Torino de Manu y lo obligó para Termas a subirse a un Dodge.
No sorprendiótanto la pole de Agrelo en Río Hondo, porque fue la consecuencia de una paulatina consolidación de Marcelo, desde que a principios del 2020 ingresó a la categoría tras una destacada actuación en el TC Pista, que lo dejó muy cerca del campeonato. Una consolidación que no tuvo el ruido mediático que merecía, por ese bajo perfil de Marcelo que incluso hizo pasar casi desapercibido su clasificación para el playoff del año anterior.
Tampoco sorprendió la conquista a pocos días del duro golpe anímico sufrido por el mencionado choque a Urcera, precisamente su compañero en el Maquin Parts. Porque como contó en la serena alegría de su primera pole ”pasé días difíciles pero tuve el acompañamiento de mi familia y equipo…”. La satisfacción de la pole recompensó esos pasajes duros que también forman parte de la vida de un piloto.
“Con estar entre los diez primeros, ya estoy contento…”, decía Agrelo antes de clasificar y dijo en la previa de la carrera sin obsesionarse, pero tampoco sin dejar de ilusionarse con completar el fin de semana ideal con el estreno victorioso.
No era una misión sencilla. Nunca es sencillo ganar en el TC y encima en la ocasión santiagueña, había otros pretendientes con sólidas aspiraciones. Sobresalían Santiago Mangoni, Christian Ledesma, Manuel Urcera, Julián Santero. Y sin descartar a Agustín Canapíno (clasificó sexto), pese a los 30 Kg de lastre, ni a Matías Rossi (10°) en el envión del Toyota, ni siquiera a Mariano Werner (22° pese a inconvenientes Como pocos, el Autódromo de Río Hondo siempre permite avanzar.