«REAPARECEN» se acerca el Dakar 2012. Alejandro sin huellas de la fractura en la mano derecha que lo tuvo a maltraer en la edición de este año que ganó, más allá de la notoria cicatriz. Marcos ni se acuerda de la fractura en su pierna, provocada mientras probaba con el cuatri para correr en enero pasado, y que casi lo deja afuera y por la que corrió en inferioridad de condiciones.
Convertidos en estandartes del Dakar «argentino», cuando se encendió la mecha por esta carrera loca, dejaron de ser los casi anónimos hermanos
de Las Flores, dedicados a la locura de los cuatriciclos y a conducir la próspera empresa familiar dedicada a la fabricación de acoplados.
«¿Si saldré a ganar de nuevo?, desde ya, por supuesto pero la prioridad será llegar; si pensás sólo en ganar equivocás la estrategia», razona Alejandro (con el Pato Silva en la foto).
-¿Decís esto para no cargarte de presión?, ya has ganado, ahora te van a mirar lo mismo que a Marcos como los principales candidatos en cuatriciclos.
-Y sí un poco me quiero sacar esa presión, quiero correr tranquilo, insisto el problema empieza cuando pensás sólo en ganar…
-¿Que ha sido de la vida deportiva de los Patronelli este año?.
-Nada, sólo trabajamos duro en la empresa.
-¿Cuando empezaron a prepararse para este Dakar, llegan bien?.
-Empezamos hace unos cuatro meses, y sí llegamos perfectos, sin problemas.
–Los Patronelli si hablamos del Dakar ya son bien conocidos, ganadores. ¿Es difícil mantenerse?.
-Seguro, es mas difícil mantenerse pero bueno, tanto Marcos como yo encaramos este Dakar más tranquis. Somos concientes que lo que hacemos es
muy riesgoso, ir arriba de los cuatri a fondo y ahí sos vos, se te pegás, no te proteje nadie, no tenés cinturón de seguridad, ni jaula antivuelco;
sin dudas estamos muy expuestos.
-Frente al Dakar y después de tres participaciones, de haber hecho hablar a todo el mundo, ¿los Patronelli están hechos con esta carrera?
-…Y diría que el objetivo está cumplido; nosotros no somos profesionales, hacemos esto porque nos encanta, nos apasiona; pero a la vez
debemos pensar en que tenemos una familia, amigos; una empresa en la que trabajamos y de la que dependen 50-60 familias.
–A ver, ¿el Dakar 2012 es el último para los Patronelli?.
-…mmm, y sí; seguramente lo es, al menos con los cuatris; pienso que en caso de correr en ediciones que vengan, lo deberemos hacer con un auto.
Foto gentileza Guillermo Cejas
Por Carlos Saavedra