ALGO MÁS QUE UN TRIUNFO
Es lo que había en juego entre Facundo Ardusso y Leonel Pernía, en la final de Termas de Río Hondo, tras 1-2 del equipo Renault en la clasificatoria de la 9ª fecha del Súper 2000.
Un retorno a la victoria del Flaco de Las Parejas consolidaba su posición del equipo Renault y por lo tanto sus intenciones de retener el número 1. Un triunfo de Pernía afirmaba sus pretensiones, y fortalecería aun más su situación dentro de un equipo que parece mirarlo con los mejores ojos, para que sea el destinatario de la corona.
La sensación se realimentó tras escuchar a un Ardusso, más preocupado por lo que se iba a venir, que alegre por la victoria parcial al decir ”ojalá podamos repetir en al final pero el auto de Pernía está mejor. Se lo ve mucho más fuerte a Leo y su conjunto. Claramente su Renault está más veloz que el mío…”. Como positivo Facu rescató que había recortado de 16 a 10 puntos la ventaja de Canapino en el campeonato.
“La orden fue cuidarnos en la primera vueltas. Después Facundo corrió bien, no se equivocó. En la final tendré más chances para superarlo”, contó y adelantó Pernia antes de reconocer sobre los rendimientos de ambos Renault Fluence que ”en lo lento estaba mejor mi auto”. Este último diagnostico no coincidió con el de Ardusso, quien destacó “en las rectas Leo se me venía mucho…”.
Menuda tarea tuvieron Marcelo Ambrogio, como director del equipo, y Miguel Angel Guerra, el director deportivo, para trazar la estrategia con los Renault de Ardusso y Pernía largando adelante la final. Es que no era cuestión de decirles “cuiden posiciones” o “hagan su carrera pero sin chocarse”. También debían instrumentar un cuidadoso plan para las detenciones a realizar, para cumplir con el obligatorio cambio de neumáticos, la característica distintiva de la fecha.
No quedó margen para fallas en esa estrategia, porque detrás de ambos Fluence partían dos que no perdonan errores: Agustin Canapino y Matías Rossi.”Aproveché la pelea entre Llaver y Rossi para ganar dos posiciones y terminar tercero“, contó el Titán. Desde ya, hubo que tenerlo en cuenta porque en la final, el campeón estaba bien atento a una posible pelea entre los muchachos de Renault.
Fotos: Prensa Súper TC 2000