FIEBRE DE TURISMO CARRETERA
A LA NOCHE
Suele escucharse, incluso de la boca misma de quienes conducen las categorías mas importantes del automovilismo nacional, que al automovilismo deportivo, le falta valor agregado. Es decir, en el mundo actual, el espectáculo ya no basta con ofrecer atrayentes carreras de autos, que despierten el entusiasmo de miles de aficionados que las sigan in situ o a través de las pantallas televisivas, en la comodidad del hogar.
La cuota de imaginación debe acentuarse para enfrentar, el automovilismo, la competencia ofrecida por otros deportes y demás atracciones que apuntan a convocar no sólo a entusiastas, también a sus esposas e hijos.
En las tres principales categorías del automovilismo en La Argentina, se han venido poniendo en práctica algunas propuestas disparadoras; el objetivo, no sólo asegurarse la fiel presencia de los fanáticos, sino también la de aquellos que apenas gustan de los autos, y poco entienden del particular y cerrado mundo fierrero.
Así el TC 2000 bajo la conducción de Pablo Peón, hizo realidad competencias que formaron parte de eventos distintos y con espectáculos en paralelo, el resultado exitoso quedó expuesto (el último, fue correr en la noche por las calles santafesinas, por primera vez en un trazado urbano). El Top Race conducido por Alejandro Urtubey, con la asesoría innovadora de Gastón Mastrolía, uno de sus hombres de confianza y director de la revista Corsa, puso sobre la mesa movidas diferenciadoras para afirmar la presencia de la categoría.
El TC de día con toda su magia, ¿que tal se vería de noche? ¿Y el Turismo Carretera?, mucho mas propensos a lo tradicional, los dirigentes encabezados con mano férrea y rumbo seguido a raja tabla por el titular de la ACTC, Oscar Aventin, se han ufanado que las “del TC son todas carreras especiales”, a modo de tomar distancia de las ideas mostradas en las pistas por las especialidades antes mencionadas.
Sin embargo, sagaz y con oficio para derrochar con su impronta, que suele rozar la arrogancia cuando del Turismo Carretera se trata, Aventin, deslizó a VisionAuto, que tiene in mente un proyecto inédito y por cierto, seductor. Que en tal caso, estaría en línea con aquella necesidad indudable de dotar a las carreras de auto de un valor agregado, que brilla por su ausencia salvo excepciones.
La idea que Aventin elabora y da por ahora sus pasos incipientes, es la de concretar una carrera de Turismo Carretera de noche. «Podría darse que le colocáramos luces a los autos para que se iluminasen; sería bárbaro el espectáculo que veríamos en la noche, el ruido impresionane de los motores del TC, el fuego saliendo de los escapes. Eso sí, cierto lugar del circuito (debería ser el de Buenos Aires), tendría que estar iluminado. Otra cosa que habría que analizar es el tema de la televisación, para que pudiera realizarse sin problemas», comentó. «Estoy pensando algo así”, apuntó el Puma, acerca del TC nocturno.
TOP RACE BAJO LA LUNA EN FEBRERO
EN EL COLISEO ILUMINADO
Se hablaba antes de la oferta distintiva llevada a la práctica, en particular esta temporada por el Top Race. Con un campeonato dividido en cuatro etapas, según las estaciones del año, al que le resta sólo la Etapa Final que consta de dos carreras.
Mientras se da por hecho la salida de la categoría de la pantalla de Canal 13, conocidas las fuertes desaveniencias con el grupo editorial propietario de la señal televisiva y de la productora “Carburando”, Urtubey ha hecho público la intención de variar el esquema tradicional del campeonato. Querría que tuviera lugar desde la mitad de un año, extendiéndose verano incluído, hasta el primer semestre del siguiente.
Y en ese marco, VA pudo saber que estaría muy cerca la concreción de una carrera de TR, durante el mes de febrero en el autódromo porteño pero…, de noche. Sí, de noche. Para posibilitar dicha realización, te adelantamos; en el trazado porteño de los Gálvez, comenzará dentro de poco la iluminación a giorno de la recta principal y de la recta opuesta. ¿Cómo en Abu Dhabi?, epa!, no exageremos…
De esa forma, quedaría la pista dispuesta para recibir primero al Top Race, y luego a los que se anotaran.
Se trata de ampliar el espectro en lo que se refiere a la atracción que despierta el automovilismo mismo. Resulta imprescindible apuntar en ese rumbo. Para que las carreras de autos, rompan la burbuja, millonaria por cierto, en que se desenvuelven.
