MIRA QUE SE HABLA, de la necesidad de trabajar para la captación de nuevos públicos para el automovilismo.
Y se tiran ideas, intenciones, se dan algunas movidas pero casi nulidad de planes concretos, analizados en profundidad para llevar a la práctica.
Estamos en el siglo XXI y los aficionados al automovilismo, por distintas razones, una esencial es el cambio generacional, van renovándose si bien una dinámica que no es la necesaria. De ahí que apuntar a las nuevas camadas, a los jóvenes en particular, mediante proyectos elaborados por las categorías y por gente que entienda de lo que se trata, con acierto y objetivos concretos a largo plazo, es clave.
Cuando los chicos que ves en la foto, se acercaron libreta en mano y lapiceras, se acercaron a Agustín Canapino después de la carrera clasificatoria de Súper TC2000 en el autódromo porteño. A quien te escribe además de dibujarsele una sonrisa, se le dio por pensar cuanto camino por recorrer hay para que a esos chicos y tantísimos otros, se les despierte el interés, el entusiasmo por las carreras de autos.
Los pibes entusiasmados, con ganas y desparpajo, se acercaron a Canapino para que les firmara autógrafos; el arrecifeño aceptó de muy buen grado (deberían reaccionar así, todos los corredores argentinos) y posó con los pibes a instancias de VA.
“Está re-bueno que los chicos se acerquen al automovilismo, me preguntaron cosas, y hasta uno como si nada, me dijo, “Agustín, pasame tu instragam, que grande!, fue un momento muy lindo».
Ojalá que de una vez por todas, el automovilismo nuestro entienda este tipo de mensajes, como el de los pibes junto al Titán en Buenos Aires.
Por C.S
Foto: visionauto