FIN DE AÑO MUY EXTRAÑO EN MARANELLO.
Podìa decirse cualquier cosa de Enzo Ferrari. Que era duro, despiadado, que enfrentaba a sus pilotos entre sí, pero lo que no podìa negarse era que su principal interés, la razón fundamental por la que había creado su marca, eran las carreras de autos. Pura y exclusivamente. Ese era su auténtico objetivo: la división de autos de lujo solo le servía para sostener su programa de carreras.
No puede decirse lo mismo de quien ocupa su puesto ahora, el mandamás de la casa de Maranello, John Elkann. Muy preocupado por la gama, su electrificaciòn futura, las acciones que cotizan en la Bolsa de Nueva York y hasta por la Juventus, tambièn en crisis. Pero se sabe que las carreras le interesan… más bien poco.
Y es asì que puede comenzar a entenderse la Saga Binotto. Se escribiò aquì que el Año Ferrari podìa ser Rojo o Negro de acuerdo al punto de partida desde el que se lo juzgara. Y resultò que, a ojos de quienes conducen la compañìa, acabó siendo un fracaso.
Mattia Binotto deja Maranello después de 28 años, se supone que con una buena pensiòn un acuerdo de seis meses sin hacer nada… antes de comenzar a trabajar en otro equipo. No solo ocurre en las pelìculas de espías: cuando un nuevo integrante llega a su flamante equipo, lo primero que hace es hablar y hablar y hablar, como si fuera un interrogatorio de la Guerra Frìa. Binotto no se llevarà un mìsero papel de su oficina de la Viale Alberto Ascari, pero en su cabeza tiene 28 años de conocimientos profundos sobre Ferrari y la Fórmula 1.
¿Cuánto vale eso para un nuevo jugador como Audi? No es difìcil establecer el vínculo: antes de ser contratado por Liberty Media como CEO, Stefano Domenicali trabajò en Audi: precisamente acababa de ser despedido por Ferrari… Conoce desde hace décadas al ingeniero suizo que acaba de renunciar a su puesto de Team Principal del equipo del Cavallino al sentir que no tenía el suficiente respaldo.
Y Ferrari no tiene Plan B. Binotto ya lo tiene: si no es Audi puede ser otra escuadra. Pero Ferrari solo sabe que su propio Administrador Delegado, Benedetto Vigna -que no está probado que sepa mucho de carreras, sì de electrificación- se hará cargo circunstancialmente, mientras deciden a quién contratar.
Andreas Seidl ya dijo que no.
Christian Horner rechazó la propuesta.
Siguen negociando con Fred Vasseur, el Team Principal de Sauber/Alfa Romeo desde hace cuatro años. No se sabe de grandes avances de la escudería de Hinwil desde entonces. Sí se sabe que Vasseur es muy cercano a Toto Wolff.
Y a Nicolas Todt, con quien fundaron la escuadra ASM, luego ART Grand Prix. Todt, el hijo del ex presidente de Ferrari y de la FIA, Jean Todt, es el manager de Charles Leclerc. No faltan los que aseguran que desde el episodio de Silverstone -cuando Carlos Sainz se negó a dejar ganar al monegasco, y luego se vio en cámara el dedito levantado del entonces Team Principal en el diálogo aparentemente áspero con Leclerc- Binotto y el piloto de Mónaco no se hablaron mucho. Binotto fue quien convocó a Sainz al equipo.
Jean Todt estuvo seis años como Team Principal hasta poder iniciar una saga de éxitos que hoy provoca nostagias en los tifossi. Binotto llevaba cuatro, y esta última temporada había sido la más cercana al éxito. 12 poles, cuatro triunfos, el subcampeonato de Constructores. El espesor de los logros, se insiste, se mide con la vara que se halla en el punto de partida. La Ferrari F1-75 fue uno de los dos mejores coches del 2022, inferior al RedBull RB18 en la parte final del año, pero superior al W13 de Mercedes.
En ese equipo que lideraba Todt, el responsable técnico era Ross Brawn. «No conozco el mecanismo interno de Ferrari, pero me parece que Mattia hizo un buen trabajo», declaró recientemente. «Este año, la Ferrari fue competitiva. Desde mi punto de vista, la estabilidad de un equipo y la capacidad de hacer trabajar en conjunto una escuadra a largo plazo, es lo que termina dando los mejores resultados», sentenció.
No es eso lo que suele ocurrir en la Scuderia.
Ferrari cometió un único pecado: despedir a su máximo responsable sin poseer una alternativa clara y concreta. No tenía (ni tiene) línea sucesoria. El director deportivo, el francés Laurent Mekies (de quien dependen directamente las operaciones de estrategian tan fallidas y criticadas durante 2022) no apareció ni una sola vez mencionado como candidato a suceder al número 1 siendo el número 2. En fin…
Binotto (alias «El Faraón», como lo llamaban a sus espaldas en Maranello), podía haber cosechado muchos enemigos internos, y acaso se confabularon, pero la impaciencia tampoco le está dando grandes resultados al Cavallino. En nueve años (de 2014 a 2022), pasaron por la función el citado Domenicali, Marco Mattiacci, Maurizio Arrivabene y ahora Binotto. A lo largo de todo ese período, Wolff condujo a Mercedes y Horner a RedBull.
Y Elkann no solo no es Enzo Ferrari, sino que ni siquiera puede compararse con Luca Di Montezemolo o Sergio Marchionne.
De donde el problema principal no es (no era) Binotto.
¿Retornará ahora Simone Resta, el brillantísimo técnico enemistado con el saliente manager, que pasó un tiempo en Sauber, y durante 2022 trabajo en el proyecto que Haas sostuvo econòmicamente en Maranello para el desarrollo de su auto? ¿Tendrá chance de convertirse en el nuevo Direttore Técnico de la Scuderia? El Proyecto 675, la Ferrari de 2023, ya está diseñada y en fase de construcción: cualquiera que llegue tendrá nula incidencia en el producto final pero deberá hacerse cargo de su gestión.
Es una función envenenada: si no logra los títulos irredentos, se dirá que el final Binotto no era tan malo… y si sale segundo se argumentará que eso ya lo había conseguido el manager saliente. ¿Quién querría aceptar el puesto en ese panorama?
Fuentes italianas señalan que recién en enero se conocerá el nombre del ungido, para un puesto que es una verdadera silla eléctrica. O híbrida, para estar a tono con la Fórmula 1.
Así las cosas, quizás al final del torneo 2023, Binotto ya esté trabajando en un nuevo equipo. Y Ferrari, tal vez, no haya logrado avanzar un centímetro respecto de dónde terminó el 2022.
Por lo pronto, ya arrancan el nuevo desafìo. Sainz probaba en Fiorano el martes 6, Leclerc lo hacía el miércoles 7, con las F1-75. Bajo un programa de trabajo aprobado por el propio Binotto, cuyo contrato expira el 31 de diciembre, y a quien Ferrari todavía no le encontró un sucesor…
Postdata: En 2023 Ferrari vuelve de manera oficial a las 24 Horas de Le Mans (que ganó nueve veces entre 1949 y 1965) después de 50 años. Y cuentan que Elkann está más entusiasmado con el proyecto de la 499P Hypercar que competirá en el clásico francés que en el día a día de la Scuderia de F-1…