QUEMA
CON LECHE, VE
UNA VACA
Y LLORA»
Por Carlos Saavedra
Que te vamos a contar acerca del culebrón que terminó con el frustrado ingreso de José María López a la Fórmula 1. Desde el verano hasta el momento, se han acumulado versiones, todas involucrando a Pechito y la F-1. La mas firme, supuestamente, además de la única ha sido la que indica que se podría sumar como tercer; sí, tercer tester en el Hispania Racing Team (HRT). En Mónaco este fin de semana quizá haya novedades, ahora ¿quiere Pechito sentarse en una butaca del equipo que navega bien por fondo de la grilla, cuyos autos fueron descalificados hace unos días (lo reflejamos en VisionAuto) por el tester-piloto de reserva Christian Klien?. Dicen que no tiene nada de ganas de calzarse el buzo con los colores del HRT…, para colmo no es gratis (¿1,5 millón de dolares para probar cuatro o cinco viernes, en los entrenamientos previos a cada gran premio?).
Serio, sin el humor y mucho menos extravertido de como se lo conoce, José María López padre traza un panorama sobre su hijo y la F-1. Volvió a estar en los boxes de un circuito, hace unos días en el TC en Termas de Río Hondo. Se había recluído, golpeado por el duro revés padecido tanto ¿o mas? que su hijo. Pecho padre dice que el capítulo F-1 para su hijo «no está cerrado», mas allá que le costó y aún le cueste, superar la frustración. Y por si faltara algo para agitar los días del señor López, el senador Luis Juez se encargó no hace mucho, de divulgar un supuesto comentario del padre de Pechito, acerca de las trabas que tenía y aparentes «retornos» que debía pagar para poder vender tractores Pauny (es una de las principales cabeza de la empresa) a Venezuela. ¿La Fórmula 1 es mala palabra a esta altura», pregunta VA a López; «¡noo, para nada!, seguimos pensando pero somos concientes que no es fácil, mas todavía después de todo lo vivido, produjo mucho desgaste, mucho. Por eso, hay que ir despacio, el que se quema con leche ve una vaca y llora». Por ahí entre bambalinas, se menciona que la ligazón de los López con el equipo Oil Competición lo posiciona muy bien para hacer el segundo intento por llegar a F-1. Es mas unos pronuncian que el Oil Competición podría ser el trampolín. Te contamos, este equipo irrumpió en el TC sin ocultar poderío económico y técnico Cristian Avila es el máximo responsable y constructor de la nueva Chevy, y Jorge Pedersoli, experimentado y capacitado, provee los motores. Nadie lo puede firmar, pero al poderoso empresario Cristóbal López, cercano al kirchnerismo, lo consideran el verdadero dueño. Un dato nomás, los hijos, Emiliano y Nazareno, corren en TC Pista, y forman la «rama TC Pista» del Oil. Habrás leído, Cristóbal López acaba de comprar nada menos que a Petrobras, la destilería ubicada en San Lorenzo, Santa Fe, y 363 estaciones de servicios en la actualidad verde amarillas. Todo por la módica suma de 110 millones de dólares; se afirma que a principios de 2011 irrumpirán las estaciones de servicio Oil. Esto sin olvidar que se lo indica como dueño de numerosos casinos en distintos puntos del país, un negocio que moviliza unos 80 millones de pesos por año.
«No sé si vale la pena entrar a un equipo de los de tan atrás, para mí habría que pensar en entrar en uno mucho mejor, con mas chances. Si fuera a alguno de los que andan por el fondo, ¿que dirían muchos?. Por eso digo, no se si sirve ir a un equipo como el Hispania», admite López grande y sus dichos no pueden obviarse.
¿Y que decir acerca del apoyo económico imprescindible?, algunos de los aportantes para ingresar al fenecido US F1, se bajaron, entraron a boxes. Otros en cambio, mantienen el respaldo. Tal el caso del gobierno nacional que para el US F1 iba a apoyar con 2 de los 8 millones de dólares necesarios. «Sí, continuamos apoyando a Pechito desde el gobierno, sólo que hay que esperar que aparezca una buena posibilidad, y eso no depende de nosotros», responde el Ministro del Interior, Florencio Randazzo.
13-5-2010
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