QUERÍAN GANAR Y DE PASO, QUEDAR BIEN CON LOS TITULARES
Desde hace años hay una buena relación entre las familias Canapino y FaÌn. El padre de Ignacio Faín, ha sido patrocinante durante años de los Canapino, padre e hijo. Estos por su parte retribuyeron con el asesoramiento en la conducción de los autos de carrera en los primeros pasos de la campaña deportiva de Ignacio. La relación, más los éxitos deportivos de Ignacio en las categorías de la ACTC (campeón TC Pista Mouras y subcampeón TC Mouras), hicieron que planeasen un intento de participación en la Serie IndyLight estadounidense en busca de seguir los pasos de Agustín. “Por ahora no hay nada concreto” le dijo Faín a Visionauto con la alegría de su triunfo en la carrera de invitados (iba con el Peugeot 208 de Francisco Coltrinari) de la Clase 2, tras un intenso duelo con Lucas Colombo Russell. Sobre el Toyota Yaris de Bautista Damiani, ”no se equivocó “ reconoció Colombo, quien junto su tocayo Benamo forman el grupo nacional de coachs de Franco Colapinto, a quien lo han venido orientando.
Hubo tres largadas, algo que además del peligro, molestó y redujo a 10 giros de la distancia total. Además, desnudó el error de permitir a poco más 50 autos en un circuito de 3337 metros. La espera para que se acomodasen calentó los fierros de los de adelante, y el que pagó caro fue el poleman Joaquin Melo. Faín tuvo un excelente largada, clave para su posterior triunfo, que le permitiò a Coltranari a partir de las 11,35 horass, largar desde el primer lugar en la carrera para pilotos de titulares en el circuito 8 del Oscar y Juan Gálvez, utilizado el fin de semana.
Inviados de los hermanos Santiago y Manuel Mallo en la Clase 3, Matías y Agustín Canapino tenían su propio duelo desde la 10.20 en la final de invitados de la Clase 3, con el objetivo de ganar claro, y dejar a su titular en el mejor lugar de partida para la final de titulares, a las 13.30. Entre ambos estaba Rodrigo Lugón. Por lo visto Matías y Santiago tenìan un autazo, el Chervrolet Cruze, que ni siquiera con el recargo de 5/10 perdió la pole. También mostraba gran rendimiento el Cruzel del Canapino mayor y además lo tenìa a Agustín con lo que conductivamente significa.
“Trataré de hacer mi carrera y ganar, para dejarlo a mi amigo Martin en el mejor lugar de partida para su final”, anticipó Agustín mientre disfrutaba del cariño y reconocimiento de la gente. Esas sensaciones que extrañaba en IndyCar. A propósito cuando Visión le preguntó sobre que había sentido ante el tercer puesto (mejor resultado del Juncos Hollinger Racing al momento) de su remplazante Conor Daly, y el posterior encendido abrazo con Ricardo Juncos, copropietario del equipo. “No me enteré”, fue la poco convincente respuesta del Titán. Al toque ante el “Vamos Agustín, como que no te enteraste…” de Visión reacomodó el discurso y admitió, “era lo que tenía que pasar, y el resultado que debía llegar por los progresos del auto. ¿Si me dolió no haberlo logrado yo? Para nada. Son cosas de las carreras”.
Vamos Agustín….
