DEMOLEDOR.
Cuando en visionauto echó una mirada sobre la victoria sabatina en La Plata de Mariano Werner, se habló de «nocaut». Justo el día que se cumplieron 50 años de aquella memorable epopeya boxística de Carlos Monzón al ganarle, al devastar, al gran campeón de entonces de los pesos medianos en el mundo, Nino Benvenuti (vaya coincidencia, su derrotado en el Mouras, había sido Juan Cruz Benvenuti).
La dominguera resultó otro round si de continuar con la analogía, demoledor. Mariano ejecutó otro paso superior, como para que a los rivales en los Torino no pudieran oponer resistencia. De nuevo Benvenuti, seguido por el Tubo Gini quien quiso ejecutar al de Neuquén lo para quitarle el segundo puesto pero no le alcanzó. Los escucharonn otra vez «la cuenta de 10».
Recordó con su brillante pluma, Ernesto Cherquis Bialo, la confesión de Monzón luego de su monumental triunfo ante el fantástico e imbatible Nino Benvenuti, en Italia el 7 de noviembre de 1970, «Lo dejé venir para que se confiara, hice cintura, le metí la derecha cruzada y con la izquierda lo fuí llevando de un rincón a otro. Al final lo encerré, bajé los brazos para que se animara a sacar las manos y sobre su izquierda le metí la derecha a fondo. Cuando vi que se caía -12° asalto – me di cuenta de que no se levantaba más. Le podían haber contado mil. Un tano subió al ring y quiso parar el encuentro, pero no había nada que hacerle: Benvenuti estaba aniquilado”, contó una y mil veces Monzón en vida.
La Copa de Oro al lado de Werner. Se mira ¿y se toca en 2020?
Mariano Werner en términos fierreros en su caso luego del tremendo doblete de victorias en el Mouras platense, bien pudo reflejar algo similar, si de continuar con el juego imaginativo se trató.
Demostró tamaña superioridad arriba del Ford del equipo Fadel Memo Corse, que llevó a la carrera a transitar por la absoluta medianía, previsible y sin interés. Para que ahondar en los escasos detalles surgidos de la pista del Mouras, donde no es sorpresa, conseguir que haya sobrepasos en muy complicado, a lo agregamos a esa tendencia tan marcada, la «excesiva» paridad de los coches actuales del TC. Hiper competitivos, y desarrollados, no dan lugar a lo buscado y necesitado, para ofrecer espectáculos que atrapen a los espectadores. Claro, la materia pendiente no debe solo aprobarla el Turismo Carretera, otras categorías también…
Por eso más allá de reiterar lo que pudiste ver, por tele claro; o escuchar por radio, dado que vaya saber hasta cuando estará vedado el ingreso de espectadores a los autódromos, extenderse suena a redundancia. Werner fue el amo y señor del finde en el Mouras. Y a manera de certificarlo y ampliar el panorama en el TC de cara a las tres fechas decisivas, fijate estos datos:
º Desde las dos últimas carreras de 2009 y la primera de 2010 en el deshabitado, abandonado, Autódromo de Mar de Ajó cuando Emanuel Moriatis lo hizo, no se daba en el TC que un piloto ganara tres veces al hilo. Werner lo hizo (San Nicolás y La Plata por dos).
º De los suculentos 94 puntos en juego que hubo, el entrerriano capturó 90!. Le faltaron los dos puntos otorgados a cada dueño de las pole position.
º Con los tres primeros puestos alcanzados, Werner reiteró lo hecho por el mismo en 2016.
º Como se encuentra estipulado, por cada carrera ganada en la etapa regular, el piloto que se metiera en la Copa de Oro, acumulaba ocho puntos a modo de «bonus» extra. Werner por los tres triunfos, sumó 24 porotos de suma importancia para encarar la Copa de Oro «Río Uruguay Seguros», en el Autódromo Oscar y Juan Gálvez porteño.
º Una particularidad, el brillante desempeño en un año tan complejo de Juan Cruz Benvenuti, incluída una victoria, lo llevó a imponerse en la etapa regular por lo tanto ingresó al playoff con 23 unidades. Sí, una menos que Mariano…
º Antes del triunfo en domingo, Werner se encontraba 22,50 puntos por detrás del puntero del campeonato y ganador luego de la etapa regular, el sureño Benvenuti.
º En las ocho carreras disputadas en un año que el TC, el automovilsimo, el mundo, no van a olvidar por la pandemia, Mariano se llevó tres victorias y visitó el podio dos veces más. En Neuquén donde llegó segundo y en Buenos Aires, tercero.
º En el reinicio luego del parate, efectivizado como recordás en San Nicolás, clavó Werner la pole para esa doble fecha. Y cuando todo estaba dado para que ganara, rompió el motor en la carrera inicial y en la siguiente debió partir último.
º Werner se encuentra en óptimas condiciones en el Ford del equipo de Marcelo Occhionero (sigue ante las circunstancias actuales, las carreras desde Miami donde vive y desarrolla su actividad empresarial) de dejar atrás la sequía de campeonatos que padece la marca Ford. El último campeón para el óvalo fue el Gurí Omar Martínez en 2015, y el anterior Diego Aventin (2013).
º El Ford del entrerriano se muestra en plena forma, Rody Agut proporciona un motor con gran potencia y la labor técnica encabezada por Marcos Laborda de reconocida capacidad y trayectoria, paga muy buenos dividendos. Cuidado el coche mientras estuvo bajo la tutela del DTA Racing de Ulises Armelli, también mostró alto nivel en las pistas. Al staff sumó desde La Plata su copiosa experiencia y astucia el Toto Etchegaray, como directo consultor de Mariano. Ah!, cuidado con los kilos de lastre cargados, más aún ante los días más calurosos que se avecina…
º Los dos triunfos en La Plata, elevaron a 15 los conseguidos por Werner en las 187 carreras de las que participó al momento.
Ahora la Copa…
Fotos: Prensa Werner.