ALGO MAS QUE UN DETALLE ESTÉTICO.
Clase 2003, Franco Alejandro Colapinto. Lejos, muy lejos de los planes de sus padres, estaba en 1982 en el estallido de la Guerra de las Malvinas que enfrentó a Gran Bretaña con Argentina. Tal vez por el relato de sus mayores o por propia investigación, pudo conocer lo sucedido en esos tristes 73 días de abril, mayo y junio de hace 42 años que se llevaron la vida de 649 compatriotas. Gran parte (323) con el hundimiento del Crucero General Belgrano, bombardeado por un submarino nuclear inglés pese a encontrarse en zona de exclusión. O quizás no conozca mucho, algo que suena más probable, viendo el desinterés por la historia que tiene la nueva generación de jóvenes de la cual, con sus cosas buenas y de las otras, Franco es fiel representante.
No se trata de cuestionar a Colapinto, ante la oportunidad que tenía de participar en un entrenamiento oficial de Fórmula 1 en el Gran Premio de Gran Bretaña. Nada de eso. Si, de marcar esa particular situación que tendrá al sentarse en un auto que lleva la imagen de la bandera británica, como homenaje del equipo Williams en la carrera en su país de origen. Es la primera vez y justamente cuando, al menos para una tanda se sube un argentino…Por encima que el equipo tiene todo el derecho de presentar el auto como quiera, nunca más inoportuno, al menos para quienes tienen memoria, orgullo y ven más allá de una carrera de autos y/o de sus negocios.
Esa imagen con Franco sobre un auto decorado con la bandera británica, se repetirá en la infinita cantidad de fotos, imágenes televisivas y videos que registraron la prueba que volvió a poner a la Argentina en el mundo de la Fórmula 1, aunque sea por un ratito pero sin asegurar nada para el futuro.
Entre los aficionados argentinos mayoritariamente, provocó sensaciones de alegría y disparará el entusiasmo. Quizás haya algunos, los más sensibles y memoriosos, que ante el choque visual de mirar una bandera británica acompañando a un argentino, sintieran una molesta mezcla de impotencia y bronca por ver condicionada tan agradable situación; la de tener nuevamente a un argentino sobre un Fórmula 1, a un inadecuado entorno.
Como era de esperar y resultaba lógico, Colapinto recibió el apoyo de colegas frente a la prueba. Ninguno de ellos pudo sentir el rigor de la guerra, como Gabriel Massei, quien años antes de convertirse en múltiple campeón de Fórmula 2 Nacional, participó activamente en la Guerra de las Malvinas, y hasta fue prisionero de las tropas británicas durante varios días. Por eso vale su testimonio sobre el tema.
-Vos que estuviste y sufriste la guerra, ¿qué te parece ver a un argentino sobre un auto decorado con la bandera británica?, le pregunta visionauto a Massei, actualmente retirado de la actividad deportiva.
-En Marcos Juárez (su ciudad natal y donde vive) muchos me preguntaron lo mismo. Las cosas cambiaron mucho en estos años respecto al tratamiento de lo que pasó en la guerra. Ahora lo importante es que le vaya bien Franco… Y sobre lo que me parece, no sé… No sé si está bien o si está mal…, responde con un remate cuyo tono deja la idea de cierta decepción.
Habrá que ver que siente y dice Franco si es que siente y dice algo, tras la prueba por encima de las palabras de ocasión. No se le pide un volantazo frente a esta gran chance, que bien supo construir. Puede ser una mención, un gesto, un recuerdo. ¿Querrá? ¿Lo dejarán?
Puede sonar ingenua esta posición, con el señalamiento del detalle y no la condena al ensayo, en momentos que la voracidad argentina por volver al protagonismo en la Fórmula 1 admite cualquier cosa, y ni que hablar en una época donde se priorizan los negocios de empresa multinacionales por sobre el deporte.
Nada nuevo, por cierto, pero sí, es digno de recordar. Por eso no está de más marcar ese detalle de la bandera inglesa al lado de un piloto argentino. Para que sepan que aunque haya quienes digan lo contrario, “los argentinos existimos”, también perdonamos y tampoco olvidamos.
Al que conoce un poco de automovilismo sabe que williams es mas ingles que volante a la derecha.
Y lo pueden decorar como se les cante.
Nada quita que las malvinas son fueron y seran argentinas.
Vamos franco carajo !!!
Mas que pertinentes y acertadas tus reflexiones Miguel.
No esperaba menos de tu particular vision del automovilismo,siempre recordándonos que es mas que un negocio.
Quedense tranquilos que ya no queda nadie de la familia Williams por suerte
Respuesta: NO
ok
En argentina tenemos un presidente que revindica la dictadura y a los milicos que mandaron a los pibes a la guerra, mira si les va a importar una bandera en un auto de carrera.
En lo que respecta a el, cambio el casco para esta fecha y volvio a usar el que tiene la bandera Argentina (el resto de las carreras usa el negro de BZRP). Lo importante es que haya un argentino en el radar, el resto es boludeo.