“EL TC NO ESTÁ
EN VENTA,
NO SE VENDE, NI SE
VENDERÁ JAMÁS”
EN VENTA,
NO SE VENDE, NI SE
VENDERÁ JAMÁS”
Por Carlos Saavedra
En Termas de Río Hondo, Santiago del Estero, el Turismo Carretera afronta un nuevo compromiso; coincide con el lanzamiento de la temporada alta en la ciudad termal. Es por eso que es un fin de semana a full, con visitantes de la provincia y de otras vecinas, atraídos por partida doble. Mirtha Legrand, la abuela de la apetecible Malparida Juanita Viale, como el año pasado ha de ser una de las personalidades que han de asistir a la fiesta por el comienzo de la temporada y, de paso, darse una vueltita de nuevo por el autódromo, como supo hacerlo.
El costado político tampoco queda descuidado, tratándose de un evento como los del TC, con connotaciones que suelen exceder las deportivas. El ministro del interior Florencio Randazzo y el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli, resolvieron acercarase a Termas. Ambos se reúnen con el gobernador Gerardo Zamora para tratar asuntos vinculados a la política y a la gestión. Y desde ya, se supone que no han de faltar por el autódromo, dispuestos a escuchar como braman los TC.
La política y el deporte; que cosa ¿no?, íntimamente ligados a lo largo de la historia argentina. Cuantas veces la política ha girado y dependió del deporte…
La ciudad TC a pleno en el autódromo, la gobernación invirtió una millonada para levantarlo hace un par de años en un lugar que, con el lago formado por la represa ahí nomás, brinda un paisaje exótico.
El 89% de las plazas hoteleras, según los últimos reportes estan cubiertas; y fueron las de 4 estrellas las mas solicitadas. Se habla que a la hora de hacer andar la calculadora el lunes, habrán circulado en Termas unos 8 millones de pesos.
¿Que otra categoría provoca semejante conmoción?; si sos seguidor del TC, habrás escuchado mas de una vez como el presidente de la ACTC, Oscar Aventin, se ufana del movimiento económico y la repercusión que provoca «su» Turismo Carretera. Insiste en negar el hombre, que el TC «sea un gran negocio». Lo circunscribe a una pasión que alimentan corredores, dirigentes, los fanáticos que generación tras generación, no lo abandonan, le son fieles, y a conducir apenas una asociación civil sin fines de lucro que sólo defiende «los sagrados intereses de la categoría», y luego el de sus cultores.
Pero, ¿a quien le caben dudas que el Turismo Carretera con alrededor de 50 autos en cada pista que visita, haciendo escuchar ese sonido sublime de los motores a casi 10.000 revoluciones por minuto, es un negocio enorme?. Por el alcance que ha logrado, la irrupción trabajosa y aún inconclusa en otros ámbitos que superen el mudillo fierrero, el inusitado crecimiento técnico, el rico valor humano que lo asiste, el TC es un éxito redondo en un país jaqueado por condiciones económicas y sociales lejos de las ideales, e incluso con participantes con cuentas en rojo…
En este mundo donde los negocios van y vienen, donde las empresas se diversifican y exploran terrenos inimaginados años atrás, el TC se convirtió en un apetecible bocado. Aunque la dirigencia lo niegue en público, es conciente que están sentados sobre un portentoso negocio, generado por la categoría mas antigua del mundo que la llevó a entrar el libro Guinness de los récord. Bueno ese negocio originado por las carreras de TC que con cerca de 100 autos por reunión (sumado el TC Pista), despliega en cada circuito unos 30 millones de dólares de capital según Aventin, supo estar en la mira, hace tiempo, de grandes capitales que mensajearon a la ACTC: «queremos comprar la categoría».
Después de pesar los quilates del oferente, el Puma Aventin, habrá sacado pecho antes de soltar: «el TC no está en venta, no se vende ni se venderá jamás». Tomá.
El costado político tampoco queda descuidado, tratándose de un evento como los del TC, con connotaciones que suelen exceder las deportivas. El ministro del interior Florencio Randazzo y el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli, resolvieron acercarase a Termas. Ambos se reúnen con el gobernador Gerardo Zamora para tratar asuntos vinculados a la política y a la gestión. Y desde ya, se supone que no han de faltar por el autódromo, dispuestos a escuchar como braman los TC.
La política y el deporte; que cosa ¿no?, íntimamente ligados a lo largo de la historia argentina. Cuantas veces la política ha girado y dependió del deporte…
La ciudad TC a pleno en el autódromo, la gobernación invirtió una millonada para levantarlo hace un par de años en un lugar que, con el lago formado por la represa ahí nomás, brinda un paisaje exótico.
El 89% de las plazas hoteleras, según los últimos reportes estan cubiertas; y fueron las de 4 estrellas las mas solicitadas. Se habla que a la hora de hacer andar la calculadora el lunes, habrán circulado en Termas unos 8 millones de pesos.
¿Que otra categoría provoca semejante conmoción?; si sos seguidor del TC, habrás escuchado mas de una vez como el presidente de la ACTC, Oscar Aventin, se ufana del movimiento económico y la repercusión que provoca «su» Turismo Carretera. Insiste en negar el hombre, que el TC «sea un gran negocio». Lo circunscribe a una pasión que alimentan corredores, dirigentes, los fanáticos que generación tras generación, no lo abandonan, le son fieles, y a conducir apenas una asociación civil sin fines de lucro que sólo defiende «los sagrados intereses de la categoría», y luego el de sus cultores.
Pero, ¿a quien le caben dudas que el Turismo Carretera con alrededor de 50 autos en cada pista que visita, haciendo escuchar ese sonido sublime de los motores a casi 10.000 revoluciones por minuto, es un negocio enorme?. Por el alcance que ha logrado, la irrupción trabajosa y aún inconclusa en otros ámbitos que superen el mudillo fierrero, el inusitado crecimiento técnico, el rico valor humano que lo asiste, el TC es un éxito redondo en un país jaqueado por condiciones económicas y sociales lejos de las ideales, e incluso con participantes con cuentas en rojo…
En este mundo donde los negocios van y vienen, donde las empresas se diversifican y exploran terrenos inimaginados años atrás, el TC se convirtió en un apetecible bocado. Aunque la dirigencia lo niegue en público, es conciente que están sentados sobre un portentoso negocio, generado por la categoría mas antigua del mundo que la llevó a entrar el libro Guinness de los récord. Bueno ese negocio originado por las carreras de TC que con cerca de 100 autos por reunión (sumado el TC Pista), despliega en cada circuito unos 30 millones de dólares de capital según Aventin, supo estar en la mira, hace tiempo, de grandes capitales que mensajearon a la ACTC: «queremos comprar la categoría».
Después de pesar los quilates del oferente, el Puma Aventin, habrá sacado pecho antes de soltar: «el TC no está en venta, no se vende ni se venderá jamás». Tomá.
Foto AIF
7-5-2010
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Mi hija fue de vacaciones con la teda y vino muy cottenna, dijo que el lugar era hermoso y fueron muy bien recibidos. Somos de Uruguay y nuestras prf3ximas vacaciones pensamos regresar en familia.