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CARGADOS DE HISTORIAS. PARA «LIMAR» BUSCANDO VELOCIDAD, PARA ESAS JUNTADAS DE APASIONADOS ALREDEDOR DE UNA INFALTABLE PARRILLA, O DE UNA TORTA DE CUMPLEAÑOS. UNA ÉPOCA IRREPETIBLE.
El cumpleaños número 85 de Guido Di Nella, dio pie a que sus hijos se lo celebraran con una fiesta sorpresa, rodeado de algunos de sus viejos amigos entrañables.
Guido, es dueño de una empresa de radiadores ligada al Turismo Carretera desde hace décadas, y convertida en emblema aquilatado del TC. En los años 80 cuando tantas partes y elementos de los autos eran caseros y artesanales, hechos por manos con señales de aceite y nafta.
Todos, o casi todos los corredores deñ TC, utilizaban sus productos, de esa calidad propia de artesanos sin par. El trabajo de Guido, desde ya, lo llevó a cosechar tantos amigos.
Su hijo, Carlos Di Nella, corrió en F-3 Sudamericana y cuando le tocó retirarse, se volcó a trabajar en el viejo taller de la calle Alfredo Palacios en Lomas del Mirador. Allí ya no ves autos de TC, el espacio fue cubierto por camiones y ómnibus que utilizan esos radiadores metálicos irreprochables.
Guido hacía su trabajo a la vieja usanza, con bronce, soldadura y ácido, un método que, industria plástica mediante, pasó cuarteles de invierno. Sin embargo, y pese al transcurrir de tiempo, no puede evitar pisar y recorrer ese lugar por donde pasaron figuras del TC.
Múltiples anécdotas, hazañas contadas al voleo y mucha, pero mucha velocidad…
Entre los que se acercaron a acompañar a Don Guido, estuvo Jorge Pedersoli, olvidándose de su carencia respiratoria, acompañado por un sistema que lo asiste, al contar incontables historias surgidas en su inmensa y gran exitosa trayectoria.
Ese mismo taller, sirvió para reeditar tiempos idos, esas reuniones de amigos con nafta en las venas, Esta vez fue para festejar, desde ya rodeados de amigos, los 85 del «viejo» Guido.
Entre los que se sentaron a la mesa, Hugo Piccinini, aquel de la Dodge Blanca; Rody Agud, motorista de Mariano Werner y otros, Bernando “Cumbia” Vergés!, ex piloto de Midget, Citroen y Supercart; Carlos Gallichio, múltiple campeón del Midget y piloto de TC con Ford, Eugenio Chemoli, ex campeón del midget; Facundo Gil Bicella, secretario de la ACTC y más amigos ligados al mundillo de las carreras.
“Nunca nos peleamos, siempre trabajamos juntos y con respeto. Por supuesto cada uno tenía su personalidad, pero nunca discutimos. Nunca entendí porque se fue, teníamos muchos proyectos pero el decidió tomar otro camino, incluso ya desvinculado, seguíamos cambiando ideas, siento mucho su ausencia”. Uno de los momentos más emotivos, cuando Pedersoli evocó a su colega y socio de toda la vida, un bastión más en la historia del TC: Omar Wilke.
Los talleres del TC, de una u otra manera, persisten en seguir viviendo.
referencia foto portada: (de izq. a der.) Daniel Jáuregui a cargo de la coordinación de cursos impulsados por la ACTC, el ex piloto Carlos Gallichio, Eugenio Chemoli, célebre hombre de los midget, Carlos Di Nella, Facundo Gil Bicella y Bernardo “Cumbia” Vergés, otro ex piloto personaje, Jorge Pedersoli y el cumpleañero Guido Di Nella. Salud muchachos!
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