FESTEJOS ALEMANES
Sin ser totalmente definitorio como en anteriores ocasiones, el Gran Premio de Japón comenzó a concretar cosas que se venían intuyendo en el Campeonato Mundial de Fórmula 1. Por ejemplo, el esperado título de Mercedes Benz en la Copa de Constructores. Nadie imaginaba otra cosa, pero faltaba la rúbrica en los números, algo que llegó con el 1 -3 de la marca alemana que le posibilitó sumar 593 puntos y con 172 en juego ser inalcanzable para los 385 que cosechó Red Bull. De esta manera Mercedes obtuvo su tercera coronación consecutiva en este rubro. Avanzó al 6º lugar en la tabla general que encabeza Ferrari (16), seguido de Williams (9), McLaren (8), Lotus (7) y Red Bull (4) de un certamen que empezó a disputarse en 1959.
En cambio, no hubo definición en el campeonato que más le interesa a la gente, como es el de los pilotos. Sin embargo el nuevo triunfo, el noveno de la temporada de Nico Rosberg, sumado al opaco domingo de Lewis Hamilton, impulsaron un poco más la candidatura del rubio alemán hacia su primer título. Por de pronto estiró su ventaja a más de un Gran Premio, ya que con 4 fechas por disputar (Estados Unidos, México, Brasil y Abu Dhabi) y 100 puntos en juego aventaja por 33 (313 a 280) a Hamilton. «Es una diferencia muy difícil de descontar pero haré todo lo que pueda» estimó el inglés con cierta resignación. ¿Real ó simulada?
“No pienso en esa ventaja, sino en encarar uno a uno cada Gran Premio, las matemáticas no cuentan cuando tenés a Hamilton como rival y compañero…” declaró un feliz pero prudente Rosberg luego de hacer realidad su 23ª victoria en el Mundial de Fórmula 1 que lo igualó con Nelson Piquet en la tabla general de ganadores. Un día antes, con su 30ª pole había superado en ese rubro la línea de Juan Manuel Fangio, aunque con muchas más carreras (202 contra 51) que el argentino. Por eso el Chueco sigue están al tope en efectividad (56,86%) entre los poleman.
“Cometí un error y patinaron las gomas” fue la explicación que Lewis Hamilton entregó sobre su otra fallida largada que en este caso lo retrasó desde el segundo al octavo lugar en una situación que favoreció el cómodo triunfo de Rosberg. Pudo recuperarse el inglés, gracias al rendimiento de su Mercedes y favorecido por la errónea estrategia (demoró un par de vueltas la entrada de Vettel para el cambio de gomas) de Ferrari. Así llegó al par de vueltas finales y ahí intentó quitarle el segundo puesto a Max Vertappen. Se defendió bien el holandés que mantuvo la posición e hilvanó su sexto podio del año. Mercedes Benz hizo un reclamo en busca de lograr un 1-2 pero sugestivamente fue el propio Hamilton quien lo desactivó con un “no hay problemas de mi parte. Escuché lo que hizo el equipo pero les dije que nosotros no hacemos esto. Somos los campeones. Max se defendió muy bien y listo…” Extrañamente despreció así la posibilidad de escalar al segundo lugar y sumar otros 3 puntos que pueden ser decisivos en la definición del campeonato con su compañero Rosberg.
¿Habrá sido porque Lewis ya conoce cómo debe terminar esta historia?
Por el equipo de VA
Fotos: f1aldia.com