¿ANTICIPO Ó ESPEJISMO?
Este es el interrogante que plantea el triunfo de Valtteri Bottas en el Gran Premio de Australia que en el circuito de Albert Park abrió la 70ª edición del Campeonato Mundial de Fórmula 1. Vista su contundencia por sobre su escolta Lewis Hamilton en el dominio de Mercedes Benz ¿habrá sido el anuncio que este año no se conformará con ser un simple acompañante de inglés? O recordando que esto recién empieza, simplemente habrá que tomarlo como un hecho circunstancial de una fecha inicial.
Por ahora, Bottas disfruta merecidamente de la que calificó como “la mejor carrera de mi vida” y significó su 4º éxito en 119 Grandes Premios en la Fórmula 1. Asimismo fue la 4ª victoria de Mercedes Benz en la carrera australiana, tras los éxitos de Nico Rosberg en 2014 y 2016 y Lewis Hamilton en 2015 y también el 4º festejo de un piloto finlandés recordando los triunfos de Kimi Raikkonen (2007 y 2013) y Keijo Rosberg en 1985 en la primera edición puntable del Gran Premio de Australia disputada en el circuito de Adelaida, el escenario de las primeras 11 ediciones.
“Todo esto no hubiese sido posible sin el gran auto que me entregó el equipo” reconoció Bottas , que de su parte entregó una impecable tarea. Comenzó con su gran largada y la superación al poleman Hamilton, y se completó con un andar sin errores donde como dijo “tuve todo bajo control y disfruté del auto.” Un trabajo ideal que tuvo el puntaje ideal, ya que además de los 25 puntos habituales por la victoria, Valtteri se quedó con el punto por el récord de vuelta, recientemente reimplantado por lal FIA luego de 60 años.
Ni ese punto dejó Bottas para un Hamilton opacado por la contundencia del andar de su compañero. A la hora de las explicaciones, el inglés se quejó de la prematura orden del equipo para pasar por boxes para el cambio de neumáticos. Con un juego con varias vueltas, le costó contener el ataque de un destacado Max Verstappen que mostró que la incorporación de los motores Honda parece no haber mermado la competitividad de Red Bull.
Llegar y sumar fue un pobre consuelo para Ferrari, siempre obligada a ser protagonista destacado. No lo fue en ningún momento porque los autos rojos nunca estuvieron nunca cerca de los Mercedes Benz y además fueron superados por el Red Bull de Verstappen. “Esperaba que mejorasen las cosas con el cambio de neumáticos, pero pasó todo lo contrario. Habrá que analizar lo que pasó” comentó Sebastian Vettel, quien mantuvo su 4º puesto gracias a la orden («Me pidieron que cuidase la posiciòn de Vettel») que a 6 vueltas del final y cuando estaba cerca, recibió su compañero Charles Leclerc. Está claro que por el momento Ferrari tiene decidido a quien apostar para pelear el título. Ahora le queda entregarle el auto que necesita.
Fotos: formula1.com