CLARITO, CLARITO.
Así fue el mensaje que con su pole y triunfo de punta a punta en el Gran Premio de Austria mandó Valtteri Bottas a la Fórmula 1 y en especial a la gente de Mercedes Benz.
“Puedo luchar de igual a igual con Hamilton ya sea por la carrera como por el campeonato” pareció expresar entre líneas el finés con su contundente accionar en las 71 vueltas que en el circuito de Spielberg marcaron el comienzo de este demorado Campeonato Mundial de Fórmula 1. Un mensaje que tiene por objetivo asegurar su todavía incierta renovación como piloto de Mercedes Benz para el 2021.
Por lo visto en una carrera que cobró mayor interés en la parte final por la lucha detrás del Mercedes Benz ganador, habrá que tenerlo en cuenta. Con su octava victoria en 140 carreras, la segunda en Austria (había ganado en 2017) y también la segunda consecutiva en un comienzo de temporada, Bottas demostró que más allá de preferencias y tendencias marquetineras del equipo, está en condiciones de tomar el protagonismo central del equipo cuando así lo requieran las circunstancias.
Fue el caso de este Gran Premio de Austria donde la superioridad que Mercedes Benz demostró en pista se vio complicada afuera por distintas objeciones. Al denegado reclamo de Red Bull por el sistema DAS se sumaron con éxito y ya exclusivamente sobre Lewis Hamilton las penalizaciones que lo retrasaron tres puestos en clasificación (por no respetar las luces amarillas) y cinco segundos en carrera por el toque a Alexander Albon en momentos que el tailandés intentó quitarle el segundo puesto y salvar el honor de Red Bull golpeado por el temprano abandono de Max Verstappen.
Fue un toque polémico donde el pecado de juventud del tailandés que se cebó con la chance de su primera victoria (con neumáticos blandos en su Red Bull podría haberle dado lucha a Bottas) se encontró con la experiencia y astucia, y tal vez el orgullo del multicampeón que con más sutileza que intencionalidad le cerró el camino. Por eso pareció exagerada la pena de cinco segundos de recargo que lo retrasó al cuarto lugar e impidió el 1-2 de Mercedes Benz. El tiempo mostrará en cuanto influirán esos 13 puntos (25 a 12) que su compañero Bottas ya le sacó en este arranque de una temporada donde la menor cantidad de carreras harán doler más los puntos perdidos.
El toque Hamilton-Albon y sus consecuencias abrieron las puertas del podio a Charles Leclerc y Lando Norris. El inglés confirmó su ascenso y la recuperación de McLaren que también colocó a Carlos Sainz en el quinto lugar. En cambio fue milagroso lo del monegasco con la Ferrari más lenta (312,400 Km en velocidad final contra 321, 400 Km/h de Bottas) entre los 20 autos que rodaron en Spielberg. Por eso Leclerc consideró ese lugar de escolta como un triunfo. Nada que ver con ese otro segundo puesto del año pasado que, tras perder su lucha con Verstappen, tuvo para Leclerc el sabor de la derrota.