EL GOBIERNO YA NO QUIERE INVERTIR RECURSOS.
Desde que se hizo cargo de la gestión de la Fórmula 1, dos años atrás, Liberty Media revolucionó las redes sociales… pero poco más. Entre sus promesas figuró la decisión de prestigiar el calendario, pero desde entonces solo se sumó el GP de… Vietnam (para 2020); las negociaciones para un GP en Miami fracasaron y no solo eso: el modelo de negocio propuesto para esa aventura no cayó nada bien en el resto de los organizadores, acostumbrados a invertir decenas de millones de dólares año a año. Ahora, afronta una nueva crisis: la chance de que el GP más popular de la temporada, en México, se dispute por última vez este año y no haya renovación…
El último día del mes de febrero es la fecha límite para que el gobierno mexicano acepte renovar el contrato con la Fórmula 1, para continuar albergando el GP de México a partir de 2020. Según el presidente Andrés Manuel López Obrador y de acuerdo a su programa de austeridad, todo parece indicar que la capital mexicana prescindirá de este evento automovilístico.
La Federación Internacional de Automovilismo ha otorgado durante cuatro años consecutivos (2015, 2016, 2017 y 2018), el premio al Mejor Evento del Año al Gran Premio mexicano, que reúne durante todo el fin de semana a casi 300 mil personas; en 2018 los organizadores acusaron 114.563 espectadores en la jornada del domingo, cuando se disputó la carrera.
El gobierno de México viene aportando más de 60 millones de dólares por cada carrera. Durante el sexenio del presidente Enrique Peña Nieto, mediante la Secretaría de Turismo se destinaron 213 millones de dólares por cinco ediciones del Gran Premio de México (entre 2014 y 2018), según informa el diario azteca El Universal.
“No sé cómo estén los contratos de Fórmula 1. Si no están firmados, ya no vamos a poder”, dijo López Obrador la semana pasada, consultado por la continuidad de la carrera. Y el contrato vence con la próxima edición… “Vamos a seguir apoyando todos los deportes pero con austeridad sin que haya excesos, sin derroche”, asegura el mandatario.
En 2019, Bahrein y Abu Dhabi, pagarán más de 65 millones de dólares por cada uno de sus Grands Prix en el Mundial. Por su localización, recursos e inversión, esas plazas esperan solventar el gasto gracias a su turismo, pues estas carreras son un gran imán para los visitantes; aunque eso sucede particularmente en la capital de los Emiratos Árabes Unidos, no tanto en el emirato bahreiní, que siempre muestra tribunas despobladas.
En México la tasa de turismo no se incrementa sólo gracias a la Fórmula 1. De hecho, AMLO propone redireccionar esa inversión a obras de infraestructura, como el Tren Maya, que sí tendrá un efecto directo sobre el turismo.
La F-1 es muy estricta en cuanto a dar a conocer sus finanzas, pero un gobierno como el mexicano siempre tendrá la obligación de dar a conocer cuánto desembolsa del erario en eventos de esta clase. Los países asiáticos, especialmente los monárquicos del Golfo, no se sienten obligados a publicar sus cuentas: allí no hay acceso democrático a la información.
El contrato del Gran Premio de India duró tres años y, cuando se canceló en 2013, debía 51,4 millones de dólares, según el diario británico Daily Telegraph. Desde entonces, las tarifas se pagaron, pero no ha vuelto otro GP a ese país. Lo mismo pasó con el de Corea del Sur, que fue ampliamente rechazado y solo se realizó de 2010 a 2013.
La realidad es que los beneficios que genera la Fórmula 1 son visibles sólo para Liberty Media. En un buen año, la F1 puede generar más de 1.600 millones de dólares en ganancias por patrocinios y derechos de televisión, se estima que más de 500 millones de personas ven un Gran Premio a través de la pantalla chica. De esa cantidad, 700 millones de dólares –menos de la mitad- son repartidos entre los equipos. Ni un solo centavo de esas percepciones va para una ciudad organizadora.
Para una carrera callejera, como Mónaco, única ciudad que no paga por celebrar estos eventos, se gastan principalmente en sueldos, alrededor de 16 millones de dólares, los salarios al personal es el gasto más grande, con un presupuesto para el equipo de marketing y organización cercano a los 6.5 millones. El siguiente es el alquiler de tribunas, que cuesta alrededor de 14 millones para estructuras con 80 mil asientos. Asegurar un curso de 3.2 millas en la calle con barreras de seguridad y costos de cercado vale unos 8 millones. Los pagos de vehículos, oficinas y servicios públicos alcanzan los 6 millones, más otros 4.5 millones en detalles. En total, el costo operativo anual de una carrera callejera de F1 es de 57,5 millones de dólares, lo que el gobierno de la Ciudad de México paga por una carrera.
México tiene hasta el 28 de febrero para decidir si reserva una plaza en el Mundial de 2020, y por otros cinco años. “Quedó claro que el presidente, como se esperaba, no permitirá que el gobierno aporte dinero, pero no todo lo pone el gobierno. El día 28 vence la reserva de fecha en el calendario FIA, y después se puede seguir afinando la renovación”, explicó por Twitter el periodista especializado Luis Manuel “Chacho” López, que comenta las carreras de Fórmula 1 para toda Latinoamérica.
“Es probable que encuentren un patrocinador. En México es un gran negocio”, asegura a visión la periodista argentina Mónica Maristain, radicada en ese país hace décadas. Según Maristain, el tema del GP no es una preocupación generalizada en el país azteca.
La alternativa es encontrar inversores privados que compensen ese déficit, aunque en general las carreras de F-1 no permiten recuperar este tipo de inversiones. “Por ahora solamente hay negociaciones para que los promotores logren rescatarlo (al GP)”, subraya López.
En la época moderna del GP siempre se contó con la presencia de pilotos mexicanos como Sergio «Checo» Pérez y Esteban Gutiérrez, que supusieron un gran foco de atención para la carrera. Con sponsors como Telmex, propiedad de la familia Slim, la más rica del continente, muchos esperan que la cuestión finalmente se zanje. Pero lo concreto es que el modelo actual de la F-1 no cierra sin el aporte estatal.
Joaquín «Jo» Ramírez, el mexicano de más larga trayectoria en la Fórmula 1 -empezó como mecánico de Ricardo Rodríguez en los ’60, y acabó como team manager de McLaren en el nuevo siglo- expresó su preocupación por la situación.
«El nuevo gobierno está parando el progreso de México. Y también quiere parar el gran premio porque cuesta mucho, dinero sin pensar el dinero que genera y la exposición que nos da para el extranjero. Aporta mucho más de lo que cuesta», opinó ante la consulta del diario español As.
Luego, reveló: «También Carlos Slim y todo el grupo Slim están tratando de convencer al presidente de que no puede parar una cosa que está ayudando mucho a México. Pero es muy complicado». Y agregó: «Tenemos un piloto mexicano, por eso algo a lo que acuden más de 350.000 personas es increíble, quién sabe cuánto tiempo nos falta para llevar a otro piloto a la Fórmula 1».
Fotos: gentileza Diario El Mundo
Creo López Obrador Tiene razón. Tengo la suerte de conocer ese país y la F1 No es es la principal fuente de turismo. México se destaca por su rica historia y paradisíacas playas . La ciudad de Cancún recibe promedio 16 millones turistas por año y eso ni todo el calendario de f1 reune a todo ese público.
Esta bien q se corra si tienen pilotos pero no se puede pagar semejante suma para q se lo lleve una empresa.
Si es un buen negocio México q se cambien las condiciones y listo.
La clave esta en que siempre de mira lo que se «gasta» pero es muy difícil medir lo que genera porque hay un montón de cuestiones intangibles como ser cuanto costaría contratar una publicidad de la «marca país» Mexico que se difunda en mas de 100 paises durante 1 semana todos los días en variados horarios ? tan solo la pauta publicitaria de «proximo domingo GP de Mexico» ya lo nombra y lo instala en la cabeza del que lo está escuchando, semilla que puede germinar en el momento o despues de algunos años. Cuanta gente concurre a ver la F1 y aprovecha luego visitar (y consumir !) en otros lugares de Mexico y cuantos a la inversa ? Un tipo de turismo no reemplaza a otro tipo de turismo, se complementa y ahi se empasta la cuenta pero que la F1 sirve como disparador no hay dudas.
Todo esto no lo digo solamente por los mexicanos, aca los cráneos que nos gobiernan «se ahorraron» 10 millones de u$s del Dakar que beneficiaba la economía de 5 provincias y la marca país a nivel mundial y simultáneamente le condonaron 70.000 millones de u$s de deuda a Molinos Rio de la Plata del multimillonario Perez Companc.