MENOS TENSIÓN, la misma pasión.
“Y sí…, este año estoy más tranquilo…”, reconoce Ulises Armellini, ante Visión, recordando las tormentosas, aunque exitosas, temporadas 2014 y 2015 vividas como director deportivo del equipo Peugeot de Súper 2000, debido a los enfrentamientos entre Néstor Girolami y Agustín Canapino. Las compara con la pacífica convivencia que este año tienen Mariano Werner, Damián Fineschi, Fabián Yannantuoni y Facundo Chapur, sus actúales pilotos.
Un panorama más tranquilo, al que paradójicamente le faltan esos grandes resultados que abundaban en tiempos del Bebu y el Titán, pese a que tres de esos pilotos (Fineschi 5º, Werner 7º y Yannantuoni 9º), se ubican dentro de los diez primeros del campeonato.
“Werner podría haber estado más adelante de no haber perdido muchos puntos por distintos problemas”, teoriza Ulises, aunque sin por esto desconocer que “todavía de nuestra parte, debemos seguir trabajando para entregarle el auto que ellos quieren. El equipo tiene que interpretar lo que necesita el piloto, y todavía estamos en esa etapa. Sabemos de su importancia porque ya lo vivimos el año pasado con los pilotos que teníamos. Por eso cuando ahora veo el auto que tiene Canapino, veo muchas cosas del Peugeot del año pasado…”.
De cara al futuro y las chances de pelear por el tercer título consecutivo de Peugeot en equipos y pilotos, Armellini considera clave la próxima edición de los 200 Kms. de Buenos Aires porque, “ entregarán muchos puntos y no habrá penalizaciones”. Para la carrera del 31 de julio en el Gálvez, Peugeot guarda una carta importante para el pretendido triunfo. Es el retorno como invitado del bicampeón Néstor Girolami, actualmente en el Stock Car Brasileño. “Es el mejor invitado de todos, porque conoce el auto y la categoría, y esto es un plus para nosotros”, destaca Armellini, quien todavía no tiene decidido quien acompañará al Bebu sobre el 408.
-¿Cómo ves la actualidad del Super TC 2000‘?, pregunta Visión, enfocando el diálogo al terreno institucional.
-Creo que el segundo semestre será importante para consolidar lo hecho y mejorar la categoría. En esta primera mitad del año se hicieron cosas pero pudieron hacerse más…
-¿Cambió algo con la salida de Peón y el ingreso de Abrazian?.
-Sí. Antes había un feudalismo, ahora hay una democracia. Peón hizo cosas buenas, como los 200 Kms. y el callejero de Santa Fe, pero también hizo de las otras. Tomaba decisiones sin consultar, y muchas veces había que esperar que regresase al país para saber lo que iba a pasar. Ahora se habla más, y aunque cuesta ponerse de acuerdo es mejor. Es cuestión de aprender a vivir en esa democracia. No es fácil. Al principio tal vez Abrazian pensaba que la gente de los equipos eramos unos locos porque nos peleábamos entre nosotros, y por eso supuso que sería fácil llevarnos. Sin embargo pasaron algunas cosas y Antonio (Abrazian), que es inteligente, se dio cuenta que no era así y buscó el diálogo. Por eso tengo confianza que las cosas mejorarán.
Ulises Armellini, más tranquilo y menos tenso, pero siempre directo a la hora de la opiniones.
Por Miguel Sebastián
Fotos: Prensa Peugeot Total Team.