UN BRASILEÑO CASI ARGENTINO.

 Es Carlos Bueno.o Cacá Bueno , como se lo conoce desde fines de los 90, cuando con su amigo Emiliano Spataro, disputó un campeonato tan reñido en el SuperTurismo Sudamericano que terminaron empatados en el primer puesto con igualdad de puntos, triunfos y otros resultados. A partir de ahí inició una extensa y exitosa campaña en el Stock Car Brasileño (cinco títulos) que mechó con intervenciones en Argentina, especial mente en el TC 2000 y hasta con una incursión en el Turismo Carretera en junio del 2009 en Posadas, sobre un Chevrolet.

Con capacidad y oficio, mas algo de picardía, Bueno defendio el segundo lugar en el Sprint ante los ataques de los Fluence de García y Bastidas. «Me hicieron trabajar», bromeó el brasileño.

“Me hubiese gustado correr alguna carrera más o una temporada entera, me parece una categoría interesante” le dice a Cacá visionauto,en este nuevo paso por Argentina. A los 47 años, es el mismo Cacá Bueno de siempre, cordial y expresivo, aunque haya otro colegas brasileños con el mayor atractivo que les da el haber pasado por la F-1 como Rubens Barrichello, Nelsinho Piquet, Ricardo Zonta, y quien como Felipe  Massa puede convertirse en campeón mundial pese a que se retiró a fines del 2017. En su paso por el Gálvez entre sus participaciones en el Stock Car Brasileño y el TC 2000, el paulista mostro su confianza en que ganará el juicio que inició solicitando la nulidad de la carrera de Singapur 2008 por el escándalo del premeditado choque de su compatriota Piquet que favoreció el triunfo de su compañero Fernando Alonso. No parece factible, pero si se da, Massa será campeón y Lewis Hamilton (consagrado en dicha temporada) retrocederá al casillero de seis títulos y devolverá a Michael Schumacher la exclusividad del récord de siete coronas.

“Pese a que no corrí en la Fórmula 1, los hinchas argentinos me reconocen y saludan, porque me recuerdan de aquellos años en los que venia a correr bastante seguido en Argentina” explica Cacá, sobre a esa atención que sigue generando su figura. “Los 200 Km de Buenos Aires es una carrera que siempre me gustó, no sólo por la parte deportiva sino por todo el clima que se genera y la convierten en una de las más importantes de Sudamérica”, agrega.

Si bien muestra en el TC 2000 varias participaciones y unas cuantas como protagonista importante, Bueno tiene una deuda con la categoría: la victoria. No pudo cobrarla en los 200 Km versión 2023 sobre el Honda que compartió con Bernardo Llaver. Se abrió una esperanza tras el segundo puesto en el Sprint pero se diluyó a poco de iniciada la final con el contundente andar de los Fluence. Terminaron cuartos.

“Tendré que esperar la próxima, je…”, dice con serena resignación y la esperanza de poder estar en la edición de 2024 de los 200 Km. de Buenos Aires para completar su agenda ocupada con el Stock Car Brasileño.

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En el cierre de la charla, Bueno no puedo evitar al comparación entre esta actualidad del TC 2000 y aquella más radiantes de la época (2012) en que el brasileño tenía una presencia más continua en la categoría.

“Lamentablemente no veo al TC 2000 con el brillo de hace diez años, pero sé que se está trabajando para volverla a colocar en el lugar que merece. Para eso necesita incorporar terminales automotrices y pilotos de primer nivel que faltaron en esta edición. Sé que son tiempos difíciles en la economía pero hay que  intentarlo. Puede ser que la ACTC quiera que algunos pilotos corran solamente en sus categorías pero eso no es lo mejor. No puedo opinar mucho porque no conozco algunos detalles pero por todo esto, extraño la época en que el TC y el TC2000 compartían pilotos y el protagonismo en el automovilismo argentino…”.

Cacá, hay muchos que la extrañan, pero también hay otros, que la olvidaron.

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