¿Contraer matrimonio es  más divertido que ganar un Grand Prix de Fórmula 1? “Por lo menos, dura más” afirma el flamante marido.

Un cuarto de siglo atrás, él escapaba milagrosamente de la muerte en un accidente televisado que conmovió al mundo del automovilismo.

Un cuarto de siglo atrás, ella invadía la barbería de Módena para dialogar cara a cara con Enzo Ferrari.

“¿La Fórmula1 este año? Buenas carreras, pero un campeonato con pocas alternativas –cuenta él, que la siguió por todo el planeta- Especialmente una vez que Vettel se consagró. Las últimos Grands Prix fueron un tanto aburridos, los equipos ya conocen demasiado bien la prestación de los neumáticos y entonces hay pocas sorpresas. Dónde uno entra a cambiar gomas, lo siguen los demás. Y sí, también fueron demasiadas carreras…”

Se conocían desde antes, pero formalizaron mucho después. En pareja desde 2003, Marc Surer (88 Grands Prix en F-1, ex campeón europeo de Fórmula 2, ahora comentarista de Fórmula 1 para la TV alemana) y Silvia Reneé Arias (periodista, de extensos antecedentes en revistas como Corsa o Parabrisas, actualmente en el diario Libre) formalizaron su relación este fin de semana en Claromecó, el balneario cercano a Tres Arroyos, dónde Silvia nació.

Surer y el Brabham BT54 de 1985. Le hicieron una torta parecida...

Estaba invitado Christian Danner, el primer campeón europeo de la Fórmula 3.000 y ex piloto de F-1 (47 Grands Prix entre 1985 y 1989) pero unos días antes de la boda su hijo se accidentó en Alemania y se vio impedido de llegar a Claromecó.

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Estaba invitado Ricardo Zunino, ex coequiper de Surer en el equipo oficial March de Fórmula 2 en 1979, el año en el que el suizo fue campeón. Pero una celebración familiar en San Juan, el mismo día, impidió que el Colorado pudiera acercarse.

También fue convidado Juan María Traverso, otro de los que corrieron para March aquel año; el Flaco estaba en Miami con una de sus hijas.

Estuvo, sí, Joe Brunner, dueño del equipo de Fórmula Ford con el cual Norberto Fontana fue campeón suizo en 1993. Brunner mantenía contacto con Héctor Fontana, el papá de Norberto, fallecido en mayo pasado, y tenía la esperanza de volver a encontrarse con su piloto casi 20 años después de la conquista.

Estuvieron, incluso, los enviados del Blick, el diario suizo de mayor circulación, con sede en Zurich, cubriendo de cerca la boda. La Voz del Pueblo de Tres Arroyos siguió la ceremonia como lo que fue: un verdadero acontecimiento social en la zona.

La foto del casamiento que el "Blick" publicó al día siguiente en su edición web.

 

Surer, que ya pasó los 60 pero conserva la facha (de impecable smoking negro, un clavel rojo en el ojal lo habría hecho pasar por James Bond), llegó de Interlagos, dónde terminó su año como comentarista de la red Premiere alemana. “¿La vuelta de Kimi Raikkonen? –tira en el apacible mediodía de Claromecó- Tengo dudas sobre las ganas que tiene de volver a correr. No anduvo bien en rallies, esto es muy distinto”.

Como un inefable muñeco de torta, se come el plantón en el altar. La novia llega a bordo de un original Ford A modelo 1928, que no ha sido restaurado. Su dueño, Eduardo, cuenta que lo trajo de Tres Arroyos, dónde lo tiene, a bordo de un trailer…

Marc y Silvia, a bordo del Ford A modelo 1928, rumbo a la fiesta

El padre Miguel Zentner no se priva de la humorada: “Silvia, mirá que te hiciste rogar… Y te fuiste a buscar novio del otro lado del charco”. Por ahí anda Natt Nattkemper, el camarógrafo que sigue la F-1 para Fox Sports, tomando imágenes de la ceremonia y luego de la fiesta; lo siguen con la mirada Felipe McGough y el querido Juan Fossaroli; a la mesa se sientan luego junto a Robert Von Kreutzbruck, que corría en Turismo en la década del ’80 con el seudónimo “El Suizo”.  McGough muestra las fotos más curiosas del reciente GP de India: un elefante en pleno centro de Delhi a las cuatro de la tarde, una familia de cinco integrantes todos a bordo de una pequeña motocicleta…

La torta de casamiento con forma de Brabham...

 

La banda de rock ejecuta a los Rolling Stones, de los preferidos de Marc, y sobre la playa los fuegos de artificio iluminan la noche. La torta de casamiento está hecha con la forma del Brabham BT54-BMW que Surer corrió en su última temporada de F-1.

¡Viva la vida!

Por Pablo Vignone

Fotos: Blick, La Voz del Pueblo, archivo VA

(Un agradecimiento a Peugeot, a su director de comunicación Pablo Sánchez Liste, y a su jefe de prensa Tomás Amorena, por facilitarnos el 408 Sport con el que cubrimos tanto la última carrera del año del TC2000 en Paraná como la boda de Silvia y Marc).

 

 

 

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