COLAPINTO 2026. EN ZANDVOORT, SE REINICIA LA F-1…, Y LA NOVELA SOBRE SU FUTURO

Por si todo el pobre panorama fuese poco, Colapinto agregó un hecho minimizado por varios medios argentinos que, contrariamente, han venido resaltando detalles intrascendentes. Sin embargo, tuvo gran repercusión en el ambiente de la Fórmula 1, su despiste en el Hungaroring durante las pruebas de neumáticos un par de días post GP de Hungría, antes de las vacaciones, ya concluídas. No cayó bien ni en el equipo, por lo daños al auto, ni en la categoría por la imagen ofrecida y tampoco en Pirelli, proveedora de los neumáticos, que lamentó el accidente  por el tiempo perdido en la experimentación de su nuevo producto a utilizarse desde 2026. Resultó pues, ante las instancias que transcurren, un paso atrás en el peor momento para Franco, cuando la ronda de nombres para la venidera temporada ha comenzado, y el argentino pretende mantenerse en F-1 en 2026.

“Colapinto tiene los días contados en la Fórmula 1”, avisó el sitio web racingnews365.com como reflejo de la impresión existente en algunos medios periodísticos europeos. Poco y nada que ver con los cantos de sirena y loas en favor de Colapinto que pese a la cruda y distinta realidad, son leídos y escuchados en medios argentinos, colocados más en el rol de hinchas que en el verdadero y genuíno, el de periodistas. Porqué no, obececiendo a intereses personales o de los medios, llevando a adoptar en algunas notas, interpretaciones y argumentos sólo voluntaristas o bien, alineados a un discurso laudatorio con Franco.

«Estamos ganando, estamos ganando». ¿Te acordás de aquellos mensajes -falsos y engañosos- transmitidos por algunos medios argentinos, con frases y hechos grandilocuentes que más tarde la dolorosísima derrota sufrida en 1982 por la Guerra de las Malvinas, echó por tierra el triunfalismo emergente?

Pese a tratarse de una obviedad, considerando un hecho trágico y demencial para el país, aquel del año ´82, a título ilustrativo meramente se aclara, es señalada la posición de ciertos medios locales ante el «caso Colapinto», en el afán de cubrir las espaldas de Colapinto. Sosteniendo unos, razones que llevan a citar las «chances concretas» que supuestamente tiene el pibe para ser piloto «titular en F-1 en 2026«, en tanto otros jugando con arranques tribuneros tan alejados de la esencial rigurosidad periodística, más allá que el corazoncito tire…

Para sintetizar pues como ha quedado dicho, ese mensaje que hoy considerando la millonésima diferencia de aquellos que diariamente nos ilusionaban hace 43 años con el “estamos ganando, estamos ganando…”, desenmascarado finalmente por el realista y tristemente célebre “perdimos…”, llevado al automovilismo, mero terreno e insignificante ante la inmensa magnitud de aquella lucha irredenta, ¿podría ocurrirá lo mismo con Colapinto?

Quienes dirigen la campaña deportiva de Colapinto, no desconocen que ese “perdimos” puede estar cerca más allá que está asegurada su continuidad con Alpine para los dos próximos Grandes Premios en Países Bajos (31 de agosto) e Italia (7 de septiembre). Por eso, como ocurre con muchos pilotos que se quedaron sin butaca en Fórmula 1, ya estarían mirando nuevos horizontes en otras categorías de alto nivel. Por un lado, IndyCar norteamericano, a modo de seguir el camino de los monopostos de alta potencia. Por otro se analizaría, según reportó el mismo medio, el Mundial de Resistencia (WEC). Opción que lo llevaría a los autos Sport, donde incluso Alpine tiene un equipo oficial y Franco cuenta con cierta experiencia tras su breve su paso por el European Le Mans Series.

No son las alternativas ideales para el caso, no deseado pero intuído, ante la eventualidad que Franco tuviera que dejar la Fórmula 1. Pese a esto, al menos representan una digna forma de mantenerse en el nivel internacional, a la espera de una nueva oportunidad para la dura tarea de regresar. ¿Con que nueva se va a despachar Zandvoort?