OBSESIVO, EXIGENTE, RESULTADISTA.
José Manuel Urcera muestra un ADN automovilístico que lo pinta de cuerpo entero. Obsesivo, no deja detalle librado al azar, exhaustivo cuando de todo lo atinente al mundo de las carreras. Exigente (muy) como pocos, consigo mismo y ni hablar con quienes lo rodean y alistan sus autos. Resultadista, aunque no lo haga explícito, lo absorve su vocación por el único objetivo que persigue ganar.
Actual campeón de Turismo Carretera, antes campeón de la Clase 3 de Turismo Nacional, Urcera vive por y para el automovilismo y para eso se apoya sus válidas aptitudes conductivas y en un poderoso respaldo económico. Es un hombre relativamente nuevo en el automovilismo nacional, y ha alcanzado logros valiosos que le han valido el reconocimiento del ambiente fierrero, no así en forma unánime entre los seguidores de las carreras de autos. Protagonista de episodios controversiales, polémicos y muy censurables (el más reciente, el escándalo originado y aún no aclarado y mucho menos, considerado por las autoridades de la CAF de la ACTC, cuando le dio una trompada a un aficionado debido a un supuesto altercado que, hay que insistir, en forma inexplicable, aún no ha sido evaluado como reglamentariamente es exigido, ante un silencio de autoridades y medios que no deja de llamar poderosamente la atención. Este Urcera que también, merodea el ambiente de la farándula artística, debido a su tan mediática relación amorosa con la modelo/conductora Nicole Neumann con quien va a casarse.
Este Urcera, quien luego de su partida unilateral del Larrauri Racing de la Clase 3 de Turismo Nacional, conducido por Leonel, resolvió barajar y dar de nuevo en función de sus metas, capacidad económica y obsesiones deportivas, se sumó de una al Saturni Racing y cambió de marca al subirse a un Ford Focus; en la sexta fecha de Turismo Nacional en el autódromo misionero en Posadas, Misiones, concretó su primera victoria (sexta en la clase mayor) y con la marca del óvalo en TN.
Y como le gusta, fue indiscutida; no tuvo rivales a la vista, y, ganó de punta a punta, acreditándose el premio extra de subirse a la punta del campeonato con siete puntos de ventaja al desalojado líder Julián Santero. El mendocino quien tras una gran remontada con el Toyota Corolla, una vez detenido en boxes para cambiar una cubierta pinchada, resurgió desde el fondo del pelotón (24°) hasta el valioso sexto puesto final.
.Al analizar lo arrojado por la Clase 3 en Posadas, también mereció la mención a Andrés Jakos en el Corolla renovado del Coiro Dole Racing. Andi siempre adelante a lo largo del finde, perdió el segundo puesto a manos del Focus de Leonel Pernía. Fue hasta que Leo otra vez aplicó su tan discutida y cuestionable estrategia: levantó el pie del acelerador para evitar kilos de lastre y culminó quinto. Decisión que en Posadas, le costó insultos y reprobaciones por su conocida actitud especulativa. ¿Cómo reaccionó?, sostuvo que coincidía con la reprobación de la gente, y al explicar las razones, reiteró su férrea oposición a la continuidad reglamentaria en materia de aplicación de kilos de lastre a los autos e insistió en su abolición.
En la otra «vereda», aunque sabía que su Focus en caso de ganar, iba a arrastrar 50 kg de lastre en la próxima en Concepción del Uruguay, Entre Ríos (7 a 9 de julio), a Urcera ni se le cruzó un segundo por su cabeza la posibilidad de levantar para esquivar los kilos de lastre. El rionegrino, de 31 años oriundo de San Antonio Oeste, siguió y finalizó ganando a fondo.
Así consiguió su primera victoria con Ford (sexta en su historial en TN). Jakos segundo a 5s400/1000, ye el chaqueño Matías Muñoz Marchesi, compañero de Urcera en otro Focus, completó el podio, tercero y más distante aún 8s459, al cabo de una final que no generó la acostumbrada adrenalina.
Una apreciación semejante para aplicarse a la Clase 2, carente de las luchas en pista tan frecuente.
El tucumano Pablo Ortega (VW Trend) recorrió las 16 vueltas y se quedó con la victoria, ajustada, dado que el puntano Marcos Fernández (Nissan March), sólo cruzó la línea de llegada 1s169/1000 más atrás,; y el entrerriano Marco Veronesi (Toyota Yaris) tercero a 3s729.
Fotos: Prensa APAT.
