ES LA CHANCE ESPERADA Y MERECIDA.
Claro que, por las cuestiones presupuestarias que siempre complican a los pilotos argentinos, se fue dilatando. Pero llegó el día. Porque Marcos Siebert, campeón 2016 de la Fórmula 4 Italiana doblegando ni más ni menos que a Mick Schumacher, hijo del heptacampeón de la Fórmula 1 Michael, está probando un GP3 del Campos Racing.
El marplatense está participando en los ensayos colectivos de la categoría, que consta de 8 fechas dobles y que será telonera de la F1 en siete de las mismas, en Estoril, Portugal. Y esto se logró por la gestión conjunta del Automóvil Club Argentino y Eduardo Ramírez, encargados de conseguir el apoyo económico para el piloto.
“En estos días tuve la oportunidad de trabajar en conjunto con el equipo, me siento muy satisfecho con la capacidad técnica del mismo y con la relación con todos sus integrantes que me han hecho sentir como en casa”, aseguró Marcos, quien estaba desde hacía varías semanas en Europa buscando cerrar esta oportunidad.
Siebert, además, recibió elogios del español Adrián Campos, dueño del equipo: “Estamos muy contentos con Marcos, en estos días nos ha demostrado trabajar muy profesionalmente y realmente nos gustaría poder contar con él en el campeonato 2017. Para ello estamos trabajando en conjunto con el Automóvil Club Argentino y con Eduardo Ramírez en terminar los acuerdos de patrocinio”.
Pero como en Visión no nos quedamos quietos, una fuente muy cercana al piloto, de esos que están en la cocina del asunto, nos contó que la continuidad de Marcos en la GP3 estaría casi cerrada. “Se está muy cerca porque hay un compromiso del ACA con el Campos Racing de conseguir los sponsors, trabajo al que también está abocado Ramírez. Esto le da un marco de seriedad a todo el asunto».
Es más, este amigo fue un poco más allá: «Eso sí, si el apoyo no se consigue, sería un fracaso del ACA. Por eso, si me pedís una apreciación personal, si Marcos se vuelve sería una vergüenza. Así que ya está».
Por Cristian Re.
Fotos: prensa Marcos Siebert.