DECLARACIÓN PREOCUPANTE.
Es la que hizo nada menos que Stefano Domenicali, director ejecutivo de Liberty Media, la empresa que regentea la Fórmula 1.
“Para la Fórmula 1 la actual crisis del COVID es mucho más complicada que en el 2020”,aseguró el dirigente italiano en declaraciones a Auto Motor und Sport. «El año pasado, todo el mundo tenía que encontrar un camino a través de la pandemia y aprender. Ahora cada país tiene sus propias reglas y condiciones. Por eso tenemos que decidir día a día, y ser flexibles en caso de que algo cambie a último momento», explicó Domenicali, quien en función de la complicada situación, contó que mantiene frecuentes conversaciones con los organizadores de los distintos Grandes Premios.
Dentro de ese incierto panorama para cumplir totalmente el calendario de 23 carreras, hay un par de Grandes Premios sobre los que ya se encendieron luces de preocupación. La más intensa es en Canadá por la complicada situación que pasa dicho país, ante el coronavirus y la obligatoria cuarentena que rige para quienes ingresan a territorio canadiense. La proximidad de fecha (13 de junio) apura una decisión que en caso de ser negativa dejará a Canadá sin Gran Premio por segundo año consecutivo. Como reemplazante se menciona Turquía, uno de los comodines que el año pasado ayudó a concretar un digno calendario en cantidad de carreras.
Aunque más lejana en la agenda (se corre el 29 de agosto), también el peligro de la cancelación se cierne sobre el Gran Premio de Bélgica. “Estamos trabajando para una carrera normal pero lo veo difícil”, señaló Stijn de Buever, encargado de la organización, en referencia a la actual etapa de confinamiento que sufren los belgas. Si bien no descarta hacer la carrera sin público, como el año pasado, Buever no la ve con buenos ojos porque considera que”organizar una Gran Premio sólo para ver autos en la pista no es muy interesante”. Por eso espera clarificar el tema en próximas conversaciones con el gobierno y las autoridades de Liberty Media.
Domenicali precisó que Liberty Media solo está pagando aproximadamente el 70% de los ingresos previos al COVID de la F1 a los equipos. En cuanto a los Grandes Premios, reconoció la posibilidad que algunos de los promotores puedan necesitar ayuda financiera. «Este año que también será necesaria cierta flexibilidad y encontrar soluciones para las distintas emergencias de los organizadores», anticipó.
No queda otra. Está claro que el COVID sigue complicando al mundo.