SE MANTIENE EN CARRERA
Por el equipo de visionauto
Parece mentira: es un diseño a punto de cumplir 50 años y, sin embargo, continúa en vigencia, ganando carreras. Es cierto: ya no puede usar su emblemático nombre, aquejado por una agria batalla legal, pero las características esenciales se mantienen: el óvalo azul, el motor de 5.3 litros, la carrocería distintiva, parte de la sigla. De aquel Ford GT40 ganador de las 24 Horas de Le Mans y campeón mundial de Marcas a este Ford GT del Mundial de Gran Turismo hay tantas diferencias como similitudes.
Los memoriosos se acuerdan que los GT40 vinieron a la Argentina en 1970, para correr los 1.000 Kilómetros de Buenos Aires. Ya para entonces el concepto estaba perimido. Nacido a partir de una idea original de Eric Broadley, el creador de Lola, y refinado en Inglaterra y Estados Unidos, el GT40 (llamado así porque su altura máxima era de 40 pulgadas, algo menos de un metro) ya había ganado Le Mans en 1968 y 1969, conquistando el Mundial del ’68. Para inicios de la década del ’70, era demasiado pesado como para competir con los Porsche 917 o las Ferrari 512.
Cuarenta años después de aquella visita, los Ford GT vuelven a la Argentina, esta vez a San Luis, a la última carrera del Mundial de FIA GT1. ¿Y qué autos vienen? Ford lanzó entre 2005 y 2006 una recreación actualizada del modelo, del cual ya existían numerosas réplicas: si alguien ha de hacer dinero con el concepto, hagámoslo nosotros, pensaron en Detroit.
En ese periodo fabricaron más de 4.000 modelos, de medidas superiores a las originales, por lo que es más ancho y alto (ahora mide 44 pulgadas); y el motor continúa siendo un V8 de clásico e inconfundible sonido, de 5.3 litros similar al que se usó (aunque sin las tapas de cilindros Gurney) en Le Mans en 1968 y 1969.
Sin embargo, Ford no pudo usar la sigla GT40 para marketear el nuevo producto, porque la habían cedido en los ’80 a una compañía británica, Safir Engineering, que fabricaba las réplicas. No hubo acuerdo económico para la devolución.
El equipo suizo Matech desarrolló este modelo para competición en 2008, ganando un título europeo en la clase GT3. Miralo bien: el alerón trasero y los spoilers delanteros no estaban incluidos en el original. Este año, tres Ford GT corrieron las 24 Horas de Le Mans: ninguno llegó al final. Pero en el Mundial de GT1 fiscalizado por la FIA, lograron dos victorias, en Abu Dhabi y Brno, con el alemán Thomas Mutsch y el francés ex F-1 Romain Grosjean al volante. Mutsch hoy tiene de copiloto al inglés Richard Westbrook (foto), que según un especialista de los autos sport, el periodista Gary Watkins, “es el piloto más veloz de la categoría”. Westbrook anduvo rapidito en Potrero de los Funes…
Fotos: Ford y www.tc2000.com.ar
4/12/2010
Desde ya que este es un comentario muy subjetivo ya que como se suele decir, sobre gustos no hay nada escrito, pero después de ver hoy la carrera es notable observar como un diseño de hace 50 años sigue siendo más bonito y por mucho, que el resto de los que estaban en la pista junto a él, por lo menos para mí concepto de belleza automovilística. Aclaro que no soy fana de Ford….bah…en realidad no soy fana de nada ni de nadie, me molesta sobremanera el fanatismo como para adoptar esa política.