SI LA MEMORIA NO FALLA…
nunca quizá, desde que Guillermo Ortelli es corredor de autos, ha hablado en forma tan grave y seria como lo hizo para referirse al escandalete originado por las tuercas de las ruedas de autos del JP Carrera, maquinadas para efectuar más rápido la operación del cambio de las dos cubiertas del lado derecho, como estableció el reglamento de la pasada carrera de Turismo Carretera en Olavarría.
La maniobra, censurable desde todo punto de vista, porque fue adrede y para sacar una ventaja deportiva, «una trampa» al decir de varios pilotos que no ocultaron su incomodidad cuando Visión y un par de medios más apenas, avanzaron sobre tan importante cuestión y requirieron sus puntos de vista, apenas mereció un «chas-chas en la cola», multa de 100 mil pesos mediante al JP. La debida sanción deportiva por infringir la ley, como recayó en otras situaciones; ejemplo el motor fuera de reglamento del Gurí Martínez, esta vez pasó de largo.
La tan buscada e imprescindible transparencia a la que apunta el TC, dio un paso atrás y además, ante la decisión adoptada por la CAF con la multa, sentó un precedente más que preocupante a futuro. Aquel que traspase la línea de la legalidad, a la hora de ser llevado a «juicio» ante la CAF, bien podrá esgrimir el «caso JP-tuercas» para pedir un mismo tratamiento. Es decir, nada de suspensión, y sí una multa…
Gustavo Lema, propietario y amigo del Guille, alejado de la exposición mediática rutilante de otros tiempos, sin ganas de hablar de las tuercas fallidas, se inclinó por el argumento del «error» y pidió «disculpas».
Mucho más lejos y crudo fue Ortelli cuando en tono lapidario, a una pregunta de VA respondió «lo que pasó fue muy grave y no me gustó para nada, me enteré cuando salió la sanción”. Fue entonces, sostuvo, cuando habló con Ariel Lucesoli, técnico del JP ¿y «pato de la boda?», «para pedirle explicaciones. El me dijo que hizo algo a las tuercas por decisión personal, y eso no me gustó, las tuercas mal estaban en el auto de (Pedro) Gentile pero las del mío estaban igual. Repito, no me gustó nada que se trabajara en la semana para hacer algo fuera del reglamento, y para trabajar en mejorar el auto dentro del reglamento, lo que pasó fue muy serio», y la remató con un mea culpa que nunca había salido de la boca del de Salto, «siento verguenza».
Ni cuando lo pasó Diego Aventin en maniobra tan controversial y facilitada para muchos, en La Pampa 2013, o cuando en San Luis del mismo año, cuando lo tocó a Matías Rossi y ese incidente posibilitó la victoria del Pumita camino al campeonato, Guillermo dijo lo que dijo ante el entuerto de las tuercas retocadas. A aquellos episodios, atinó sólo a relativizarlos y restarles importancia, sin responder incluso a reproches y críticas.
Unas tuercas «apenas», esta vez hicieron detonar al Guille, y con razón.
Por Carlos Saavedra (especial desde Concepción del Uruguay)
consulta, todo este lio con el JP no tiene corresponencia con el otro equipo MP en cuanto a criticas y busqueda de sanciones a pedido de los periodistas y pilotos,
El guri opina desde el punto de vits de alterar un MOTOR y acelerar x escandalo y lo compara con las rocas de 5 tuercas…..