Hacía casi 20 años que un piloto argentino no terminaba entre los diez primeros en las 24 Horas de Le Mans. El privilegio fue esta vez del acaudalado Luis Pérez Companc.
El ex piloto de rally acertó esta vez en la elección de sus compañeros y terminó en el podio de la categoría LMP2 al cabo de las 24 horas que demanda el clásico francés. No le sucedió como en 2011, cuando el enterriano Matías Russo despistó el auto tras 14 horas de carrera.
Pérez Companc mantuvo al alemán Pierre Kaffer (ex Audi) en la dotación y sumó al francés Soheil Ayari (ex Pescarolo) al cerrar trato con la firma francesa Oreca, que le armó el equipo PeCom Racing, que corrió en Le Mans con la bandera argentina.
Fueron novenos en la general, con 353 vueltas, un poco más de 4.800 kilómetrros recorridos, y terminaron a solo un giro de los ganadores de la clase, una tripulación que incluyó al venezolano Enzo Potolicchio.
El resultado le permite al piloto argentino, el único que está corriendo este año en un campeonato mundial, mantenerse octavo junto a sus compañeros en el Mundial de Endurance, disputadas ya tres pruebas del resucitado torneo: Sebring, Spa y Le Mans.
En 1986, Oscar Larrauri terminó segundo con un Porsche 962; cuatro años más tarde, marchaba segundo cuando a quince minutos del final se fundió el motor de su Porsche. En 1993, Juan Manuel Fangio II se clasificó octavo con un Toyota TS010.
Esta bueno alguien le de pelota a este podio que me parece bastante bueno. Segui las 24 hs porque son espectaculares (aparte lo puede hacer cualquiera que sepa francés y una conexión a internet) y aunque este año fue medio aburrido que no haya mucha pica como el año pasado con Audi – Peugeot, fue una hermosa carrera.
Felicito a Pérez Companc y su equipo, pero no comparto con ustedes con que se haya «equivocado» anteriormente por la elección de Russo. El pibe es bueno, tuvo mala suerte + algún que otro error, pero nada lejos de lo humano.