EL CIMBRONAZO.
La inesperada irrupción, para muchos, de Toyota en el mundo del Turismo Carretera provocó un cimbronazo fuerte. Y si bien el temblor se apaciguó con el paso de los días y las primeras pruebas del Camry, el inminente inicio de la temporada avivó las réplicas.
En la presentación de la Escudería G129 de Mauro Giallombardo, el tema no fue pasado por alto, claro. “Hay gente a la que le puede gustar y a otra no. En mi opinión le damos la bienvenida a una marca nueva”, dijo Gabriel Ponce de León, cuyo equipo puede decirse que se fusionó con el team de la Rana.“No sé si va a ser una evolución, porque es una carrocería adaptada a un auto de TC.No creo que haya grandes diferencias y entiendo que la categoría ha trabajado. Las pruebas hechas fueron satisfactorias, y se recabaron datos para que la marca sea pareja y esté a la altura de las otras cuatro. Siempre habrá gente a favor y en contra. Yo estoy a favor, no lo veo mal”, cerró el juninense, quien cumple 20 años en el TC.
Para Nicolás Trosset (el de Arrecifes continúa en el equipo con base en Hudson), fue más difícil de digerir la llegada de la marca japonesa. “Lo de Toyota me chocó en el inicio, de la manera cómo se dio. Después lo fuí aceptando. Es cierto que las redes sociales son un arma de doble filo en la comunicación, y creo que hay que escuchar al usuario, que es el fiel amante del TC. El que está del otro lado del alambrado y en ese punto y hablando del auto, si bien no deja de ser un TC, se hizo una prueba con cruce de pilotos y eso da tranquilidad”, analizó el sobrino de Norberto Fontana.“Como apasionado y piloto lo que más deseo que haya paridad. Es un auto que aerodinámicamente es superior a un Falcon o una Chevy, así que lo que más deseo es que haya lucha rueda a rueda”, cerró.
Para Giallombardo, dueño del equipo junto a su padre Néstor, el ingreso de Toyota puede ser una oportunidad y lo explicó bien claro: “Es muy bueno que entre Toyota, la hinchada de Ford me debe querer cagar a trompadas. Pero es muy bueno porque me encantaría que Ford se despierte, que la terminal se despierte y la única manera es que gente del nivel de Toyota entre a la categoría y empuje al resto de las marcas a entrar al TC”, disparó el campeón 2012 a modo de mensaje dirigido directo hacia la filial argentina del Óvalo.
¿Alguien recogerá el guante? Difícil. “Hay una realidad: Ford y Chevrolet son las marcas históricas, hicieron grande al automovilismo en nuestro país y ese lugar no se los quita nadie. Ahora bien, que entre Toyota empuja a que vuelva Ford a la categoría”, reiteró la Rana.
Como está planteado el futuro cercano, hay más chances de un desembarco de General Motors que de Ford. De hecho, ya hubo charlas de gente del Moño (Jorge Maiquez, hombre de la marca en el automovilismo) con Hugo Mazzacane el día que en la ACTC, Guillermo Ortelli anunció su retiro.
Ahora bien, el ingreso de Toyota, abre varios frentes, más allá del técnico. “Hay que ver cómo es el piso y el difusor para contrarrestar la cola, pero la luneta y el parabrisas son mucho mejor que los de un Chevrolet”, le sopló a visionauto un conocedor del tema. El más pesado es el económico. ¿Cómo enfrentarse desde un equipo clásico de TC, con el poderío financiero de una terminal? Parece difícil. Y Giallombardo, fiel a su estilo, no esquivó el bulto ante la consulta de VA: “Creo que para eso está la categoría. Confío en que se tenga en cuenta que yo soy Mauro Giallombardo, con Néstor, con la ayuda de él. Y que estamos peleando de igual a igual con una terminal. Creo que eso lo está contemplando la categoría. Y si no lo contempla, voy a ser el primero en decirlo. Hablo como dueño y financiador del presupuesto que necesitan los autos, yo financio parte del presupuesto de todos los autos. Y lo estoy haciendo desde un lugar mucho más humilde al que puede tener una terminal como Toyota, con Matías Rossi… Creo que eso va a estar contemplado”.
Despertarse Ford? Lo dudo….
La única forma sería que el TC se transforme en algo parecido al Nascar, sumando Camaro, Mustang y Challenger (el único que no tendría sucesor es el Torino), permaneciendo Toyota con el Camry y quizás sumando alguna otra marca con alguna carrocería compatible.
Pero dudo que Ford apueste a algo que no está relacionado a las pick ups y los SUVs. Haber tirado a la basura 60 años de historia y prestigio en Argentina fue mucho más fuerte que seguir dando la espalda al TC donde corren prototipos que simulan grotescamente ser un Falcon.
Saludos