CADA VEZ MÁS DICTATORIAL Y AISLADO
Figuras clave del organismo rector de la Fórmula 1, la FIA, fueron excluidas de una reunión del Consejo Mundial de Automovilismo (WMSC) debido a una disputa con el presidente Mohammed Bin Sulayem.
Robert Reid, vicepresidente de automovilismo de la FIA (foto inferior), y David Richards, representante del Reino Unido en el WMSC, estuvieron entre aquellos a quienes se les impidió el acceso después de negarse a firmar un acuerdo de confidencialidad (ADC). El documento prohíbe a los miembros discutir asuntos pertinentes a la FIA fuera de las reuniones oficiales.
Quiénes frecuentan los pasillos de la FIA dicen que Bin Sulayem exigió la nueva ADC, una forma más estricta de documento por el cual los miembros ya estaban obligados, debido a su preocupación por las filtraciones a los medios. Se han intercambiado cartas legales y la disputa ha planteado dudas sobre si las decisiones tomadas por el Consejo Mundial, incluidas las relativas a las reglas para la próxima temporada de F1, serán legítimas.
El más destacado de ellos fue la adopción confirmada de un mínimo obligatorio de dos paradas en boxes en el Grand Prix de Mónaco.
Los estatutos de la FIA dictan que los miembros del WMSC «pueden asistir a cualquier reunión» y «tienen derecho a votar». No fue lo que ocurrió.
Un portavoz de la FIA dijo: «Como es rutina en todas las organizaciones, la FIA implementa procedimientos que incluyen acuerdos de confidencialidad para garantizar relaciones confidenciales entre todas las partes, salvaguardar la información personal y proteger nuestros intereses regulatorios.
«La divulgación no autorizada de información confidencial socava nuestra capacidad de cumplir plenamente nuestra misión e impacta negativamente nuestra capacidad de generar ingresos para apoyar a nuestros clubes miembros en nuestro objetivo compartido de aumentar la participación en los deportes de motor, aumentar la accesibilidad y cultivar la innovación.
«Las medidas que hemos tomado para preservar la confidencialidad han sido respaldadas abrumadoramente por una gran mayoría de miembros del WMSC».
El emiratí Ben Sulayem ha sido objeto de una serie de controversias desde que asumió el cargo en diciembre de 2021, incluidas sus opiniones sobre las mujeres, su enfoque de la F1, cambios en los estatutos que reducen la responsabilidad, el despido de varias figuras importantes y cambios de reglas con respecto al comportamiento público de los pilotos.
Reid fue un miembro clave del equipo presidencial de Ben Sulayem, pero el escocés, ex campeón mundial de rally como copiloto, ha perdido el favor del presidente de la FIA.
Bin Sulayem se ha quejado cada vez más en los últimos meses de lo que percibe como un sesgo en su contra por parte de los medios británicos, y Reid parece haber sido sindicado con la responsabilidad de ello por el presidente cuyo autoritarismo crece mes a mes.
Richards (foto) también apoyó a Bin Sulayem en las elecciones de 2021, pero expresó su oposición a los cambios en los estatutos introducidos en diciembre pasado.
El mandatario se postula para la reelección al final de su primer mandato en diciembre próximo. Nadie se ha presentado todavía para oponerse a él.
Los conocedores de la FIA han especulado que las acciones de Bin Sulayem sobre el ADC podrían deberse a temores de que puedan aparecer historias negativas en los medios, o porque está planeando cambios adicionales a los estatutos en la Asamblea General de junio de este año que harían difícil que alguien se oponga a él en las elecciones.
Fuente: BBC Sport