QUE TENDRA ESE PECHITO..!
El ex probador de Fórmula 1 en Renault, en el Roberto José Mouras de La Plata, sumó su décimo tercera pole position, 11 de ellas consecutivas en tres categorías distintas del automovilismo nacional en lo que va de esta temporada. Incomparable. Superlativo. Sin dudas, el mejor de la actualidad.
Así es José María López, el piloto que en tan sólo un año y medio en el ámbito local se dio el gusto de transformarse en el rey de los sábados, candidato indiscutido a la «triple corona» y ocasional enemigo número 1 de sus colegas rivales en quienes despierta amores y odios por igual.
Marca diferencias y de a poco se va transformando en referente. Ya instaló su marca registrada en clasificaciones y ni que hablar cuando hay que salir a buscar la punta. Quizás el Flaco Traverso fue el que lo definió de la manera más acertada: «Tiene la escuela europea, donde te enseñan a sacar hasta las mínimas ventajas y él las aplica a la perfección».
Pero no sólo son poles las que acumula el de Río Tercero, también suma seis victorias en finales, nueve victorias en series y carreras clasificatorias y diez récords de vuelta. Que tal. Dueño de una firme y decidida conducta de vida, Pechito no deja nada librado al azar basando su accionar arriba de un auto de carreras en una fuerte concentración.
Los datos de López son indiscutidos y no resisten la menor discusión, más que nada a la hora de analizar una supremacía incontrastable en pista.
Dueño de todos los elogios, López tampoco le escapa a los errores, acaso por su corta experiencia en autos con techo, pero es bueno recordar que es «humano» con el blooper cometido en el autódromo de Buenos Aires con el TC cuando dobló por una chicana inexistente, o su enojo en la carrera del TC 2000 de San Martín y ni que hablar de la distracción cometida en la última vuelta de la competencia del TRV6 en Alta Gracia.
Son muchos los que se preguntan cómo hace este joven cordobés para subirse a un auto de carreras y muy pronto lo pone ganador. Las respuestas son muy simples y concluyentes: máxima concentración, reflejos de tigre, rápida adaptación a autos con tracción delantera y trasera, gran respuesta física y anímica, personalidad y carácter en pista y fuera de ella.
Todas esas cualidades ponen a López en lo más alto del podio y de momento hace la diferencia con pilotos de la talla del quíntuple campeón de TC Guillermo Ortelli, también por arriba de otros caracterizados como el «Gurí» Martínez, Christian Ledesma, Matías Rossi, Norberto Fontana y el mismísimo «Pato» Silva con quien mantiene enormes diferencias en el equipo Petrobras de TC 2000.
Su explosiva aparición en el automovilismo nacional, con grandes dotes conductivas y profesionalismo, le han dado una fuerte y renovada cuota de calidad a las competencias de cada fin de semana y también a las nuevas generaciones de pilotos que vienen asomando. En esa corriente aparecen el entrerriano Mariano Werner y el de Necochea Juan Bautista De Benedictis, flamante ganador en Potrero de los Funes y ese camino lo marca el cordobés.
Desde los comienzos de Juan María Traverso cuando el de Ramallo ganaba todo lo que se le ponía adelante no había surgido otro de sus quilates, Pechito López cuenta con todo para seguir sus pasos. ¿Qué tiene?, tiene todo lo necesario, el tiempo dirá.