LEO LA PEGÓ Y CAÍTO SE PEGÓ.
Síntesis porqué no, del sprint sabatino del Super TC 2000 en el Autódromo de Paraná, puesto a prueba con aprobado como calificación en el crucial item de la seguridad.
Leonel metió la tercera victoria al hilo, luego del doblete en la anterior en Río Cuarto, anda derecho y sumó para un campeonato que, aún anhela retener aunque sea muy cuesta arriba.
El Autódromo de Paraná, asistió a un festival, dado que al espectáculo lo completaron el Top Race V6, TC 2000, TR Series, Fórmula Renault y TR Junior. Mucho movimiento, como era previsible, más gente con trabajando en los boxes y, sin embargo, un patinada incomprensible: no se realizaron controles/test para detectar eventuales casos de Covid como marca el actual contexto de pandemia. La categoría esgrimió que cumplieron con las normativas entrerrianas. ¿Y el celo, rigurosidad exigidos para la vuelta del automovilismo?, ¿y el compromiso de las categorías para cumplir con las normas que hacen nada menos que al cuidado de la SALUD?. Volveremos sobre el punto.
Manuel Urcera en elChevrolet Cruze del Monti Sport, el escolta luego de varias insinuaciones que habían finalizado en abandonos. Y Diego Ciantini se lució tercero en el Honda del Pato Silva, a quien reemplazó en las dos últimas fechas por la participación del chaqueño en el Dakar. En su segunda carrera, podio…
Abrazos entre Pernia y sus mecánicos, tres victorias en tres carreras.
Desde el quinto lugar, Leonel avanzó y el momento de saltar a la punta y el momento de saltar a la punta mantenida por Urcera, llegó en la vuelta 12. Ocurrió luego de la neutralización por el espectacular y afortunado despiste de Ricardo Risatti del que te contamos más abajo.
Agustín Canapino, principal oponente en el camino al título de Matías Rossi, puntero del campeonato, había llegado quinto cuando lo que pretendió fue descontar puntos al Misil. Sin embargo, el Titán fue excluido en forma parcial porque la posición del alerón del Cruze no era la reglamentaria. Rossi no pudo sumar tampoco, en la vuelta ocho del sprint, su Corolla se puso de cola y partió raudo hacia el pasto y rápido. Pudo volver a pista con terreno perdido, y apenas llegó 13º.
«El auto me sorprendió, quizá fue producto de la goma nueva, pero era terrible cómo iba en todos los lados. Me dio la posibilidad de lucirme con lindas maniobras y ganar, algo importante de cara a la final», contó Pernia; afrontaba la final dominguera desde la primera fila.
CAÍTO
Fuerte el golpe de de Caíto en el Toyota del equipo Midas. Por instantes la preocupación sobrevoló, desactivada en principio cuando se vio al de Laboulaye salir el auto clavado en la barrera de cubiertas por sus propios medios.
Mirá la piña. Respondieron las defensas.
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Perdió el control del auto en el frenaje de la primera curva y le dio duro a gran velocidad a la hilera de cubiertas protectoras de un paredón. La impresión inicial fue que algo había sucedido en los frenos del auto.
Primero lo revisaron los médicos en el autódromo y más tarde, lo trasladaron a una clínica de Paraná donde le hicieron estudios. «Sólo me quedé sin aire un ratito y por prevención me hicieron una placa. Fue un golpe fuerte, no es lindo pisar el pedal del freno y que se vaya a fondo. Por suerte los “muñecos” de goma funcionaron bien”, contó Caíto.
Aprobado, como medida de seguridad, la contemplada por el Club de Volantes Entrerrianos a cargo del autódromo; entidad cuyos miembros «saben» de automovilismo y le ponen pila desde hace muchos años.
Fotos: Prensa Renault Spor Argenetina. Imágenes: gentileza Carburando.
