UNA BUENA IDEA.
Siempre es interesante repasar la historia. Recordar personas, objetos y hechos que dejaron una importante huella en las distintas actividades de la vida diaria. El deporte no es la excepción y el automovilismo, mucho menos.
Restaurar autos de carrera es una práctica que en los últimos tiempos ha ganado en difusión y adeptos en todo el mundo. Es una buena forma de utilizar los elementos del presente, para retornar imaginariamente al pasado, mostrando renovadas versiones de coches que dieron que hablar en su momento. También es una manera de apoyar relatos o videos y mostrar hechos a las nuevas generaciones.
Por eso alegra la notica de la “segunda vida“ que viene tomando el Ford Falcon de TC, aquel de la publicidad del Correo Argentino, que corrió Roberto Urretavizcaya en 1997. Los trabajos se realizan en Bahía Blanca, a cargo de Juan Miguel Maina y su nieto Agustín Heit. El ritmo de las tareas en tan intenso como el entusiasmo, ya que la idea es tenerlo listo para presentarlo el 24 de junio en Chacabuco en la celebración del Dia del Piloto.
Foto: Jorge Marchesin.