«¡Y DALE CON PERNÍA…!»
Muy popularizada en las época de los´70, cuando Vicente Pernía daba que hablar como futbolista y rudo marcador de punta derecha en Boca, la expresión masificada por entonces, puede trasladarse a la actualidad de su hijo Leonel en TC2000.
Y dale con Pernía, bicampeón de la categoría. Y dale con Pernía, poleman en el Cabalén. Y dale con Pernía, segundo y primero en las dos carreras de la tercera fecha en la pista cordobesa. Y dale con Pernía, cómodo líder del campeonato con 117 puntos seguido con 82 por su compañero en el Axion Energy Sport con los Renault Fluence, Ignacio Montenegro. Y dale con Pernía, apellido que excede a Leo con el retorno de su hermano Mariano, de buena actuación (cuarto y sexto) y la presencia de su hijo Tiago, segundo en TC2000 Series.
Bien podría aplicarse esa expresión ante cada uno de los logros de Leo. Un momento espectacular de Pernía, quien a los 47 años muestra una destacada vigencia y constituye uno de los grandes escollos que planta la legión de los cuarentones, frente al cada vez más intenso avance de las nuevas generaciones de pilotos.
Por encima de supuestas órdenes para respetar jerarquías, esa determinación ganadora de Pernía, se vio en la forma en que en la segunda carrera definió rápido el duelo con su joven (18 años) compañero Ignacio Montenegro. El mismo Montenegro, protagonista de una brillante escalada, en base a sobrepasos impecables y arriesgados a Bohdanowicz, Mariano Pernía, Aramendía, Vivian y Aldrighetti, que desde el séptimo lugar de largada lo proyectaron al triunfo, proyectándose en la competencia inicial que como la segunda finalmente arrancó con partida en movimiento. Un Montenegro quien también vive un momento “dulce” en su corta campaña, con el recuerdo de sus dos victorias recientes en el TCR South America en Rosario, y a su vez, las ilusiones por las chances internacionales que se le pueden abrir con la prueba programada en las próximas semana en Europa sobre un TCR. ”Le veo poco tiempo en el automovilismo argentino”, se escuchó decir en los concurridos boxes del Oscar Cabalén, muy bien poblado como en los mejores tiempos.
“Tengo un equipo impresionante”, no dudó en señalar y reiterar Pernía como otra de las importantes bases de su gran presente. El destinatario fue el Ambrogio Racing, encargado de la atención los Fluence del dominador, el mencionado Axion Energy Sport, dirigido, supervisado por Marcelo Ambrogio. Hombre de bajo perfil pero de alta dedicación, trabajo y eficacia que también abarca al TC2000 Series. No se ganan de casualidad cuatro de los últimos seis campeonatos de TC 2000, cinco de los recientes seis de TC2000 Series. A todo suma un permanente acompañamiento a la categoría, como lo reflejó en esta cita en el Cabalén la presentación de un quinto auto, que permitió elevar a 18 la grilla de participantes. Por el momento, la cantidad no le quita calidad al equipo de Ambrogio, porque además del 1-2 y 1-3 (se intercaló un recuperado Julián Santero) de Pernía y Montenegro en las dos carreras, en casi todos los casos los otros tres pilotos (Mariano Pernía, Marques y Barrios Bustos) llegaron entre los 10 primeros. La excepción fue el chileno Felipe Barios Bustos, 13° en la segunda final.
Como a su padre Vicente lo motivaban los Superclásicos futboleros de Boca contra River, a Leonel lo incentivan las carreras en circuitos clásicos de la categoría. “Es importante haber ganado en un circuito clásico como el Cabalén, que conocemos todos porque pasamos mucho tiempo entre carreras y pruebas”, reconoció Leo antes de animarse a sentenciar que “esta carrera en el Cabalén marcó el inicio de una nueva etapa del TC 2000”.
No es la primera vez que lo dice, y habrá que darle una nueva oportunidad viendo lo que se vió durante el fin de semana en el Cabalén. Un espectáculo en la pista que, sin ser tremendamente emotivo resultó atractivo. Un incremento en el parque automotor, no sólo en el TC2000 (18 autos), también en el Series (8) y la Fórmula Nacional (14). Números que siguen lejos del ideal, pero al menos representan un pequeño avance.
Y sobre la gran concurrencia de público, ilusiona a los cordobeses con recibir otra vez al TC2000 y como fecha final de la temporada. A todo hay que sumarle el hecho más sorpresivo y sugestivo: la presencia del presidente de la Comisión Deportiva Automovilística (CDA) del Automóvil Club Argentino, el ingeniero Carlos García Remohí. Estuvo acompañado por el vicepresidente 2° del ACA Jorge Revello, ambos recorrieron los boxes, y entregaron los trofeos en el podio. Hay que hacer mucha memoria para encontrar un antecedente similar, es decir la presencia de Remohí en tal situación en carreras nacionales. Un presencia reclamada, y no sólo en los circuitos, para fijar la real posición del ACA ante el avance de la ACTC. El futuro mostrará si fue simplemente para la foto, o si representó “el inicio de una nueva etapa del TC 2000”, como proclamó un entusiasmado Pernía.
¡Y dale con Pernía…!
Fotos: Prensa TC 2000
Si si,esta vez hay que darle la derecha a Garcia Remolon (y Rosales?)
Pero tambien habria que preguntarle porque se corrio el mismo finde el Rally de Argentina en Mina Clavero…