TALENTO Y ESTRATEGIA.
Resultaron los factores claves en este gran paso que en el Gran Premio de Francia dieron Max Verstappen y Red Bull en busca de terminar con el reinado de Lewis Hamilton y Mercedes Benz en el Campeonato Mundial e Fórmula 1.
El talento conductivo del holandés fue el complemento indispensable de la estrategia de una primera parada anticipada y una sorpresiva segunda con la que el equipo austriaco dejó sin defensa a las Flechas Negras. Se vio en la facilidad con la que en la parte final Max dio cuenta, primero de Valtteri Bottas, y a dos vueltas del final, de un Hamilton, que consciente del mejor rendimiento de su rival con caucho más fresco, no le planteó demasiada oposición y pareció conformarse con sumar puntos. Su distendido gesto en el podio tampoco reflejó preocupación.
Patético en este vía crucis de Mercedes en la segunda parte fue el mensaje de Bottas a su equipo tras ser superadocon facilidad por Sergio Pérez, el mismo a quien había tenido bajo control en la parte inicial. «¿Por qué nadie me escuchó cuando dije que era mejor hacer dos paradas?» lanzó el finés en una frase que desnudó la equivocación de la gente ue lidera Toto Wolff y al mismo tiempo la escasa influencia de Valtteri en las decisiones del equipo.
Tal vez Mercedes se confió luego que Hamilton asumiese la punta al aprovechar un error de Verstappen (“se me descontroló el auto”) en la curva inicial. No supo ni pudo reaccionar cuando Red Bull hizo el segundo cambio de gomas en la vuelta 31 y mandó a Verstappen con gomas intermedia nuevas para atrapar a los Mercedes que se jugaron aguantar hasta el final con una sola parada. Así selló una carrera más entretenida desde lo estratégico que desde lo visual.
Red Bull sumó así su cuarto triunfo en siete carreras y el tercero consecutivo, mientras que Max se anotó la tercera victoria e igualó a Hamilton, pero con el plus de una mayor efectividad que se traduce en los 12 puntos de ventaja (131 a 119) que sacó en el campeonato. Un campeonato donde los aciertos y errores cotizan más alto de lo habitual.