DOBLE DESAFÍO.
Le gustan los desafíos al Top Race. Por eso encara dos especiales en su regreso al Autódromo de Neuquén. Por un lado, el nuevo organigrama de dos carreras finales casi consecutiva (11,18 y 11,50 horas) de 20 minutos más una vuelta el domingo, donde además se sumaba obligación de recargar 15 litros de combustible en alguna de ambas competencias.
El otro desafío del Top Race era constituir, junto a sus teloneras Series y Junior (conservaron el esquema de Sprint y Final), y las motos del Superbike argentino, el punto de partida de la Semana de la Velocidad. Una buena idea desempolvada, y que el sábado y domingo 21 y 22 se completa en el mismo escenario neuquino con el atractivo central de la cuarta fecha del TC 2000, y los acompañamientos del TC 2000 Series y la Fórmula Nacional.
Se esperaba una semana a pura velocidad y muy concurrida. Por de pronto en el arranque entre el Top Race y motos, se había anunciado la presencia de 138 pilotos. Novedades en el Top Race mayor, el debut de Kevin Felippo en un Mondeo del R36 Team y el regreso de Adrián Hamze, con el Fiat Cronos del Octanos Competición.