FRENO, REBAJÓ, se metió en la chicana (foto, un hallazgo de AIF) y ahí pudo empezar el tremendo susto para Agustín Canapino y todos los que estaban en el Fangio balcarceño. Segundos después, cuando intentó frenar en la recta para encarar la curva 1, el Chevrolet no le respondió debido a un flexible de frenos cortado, dijeron allegados a Agustín en el paso por la chicana, y el auto siguió de largo a mas de 200 km/h.
Pasó como una exalación la vía de escape, pegó contra las cubiertas para contención que le hicieron de rampa de lanzamiento y levantó espeluznante vuelo. En el aire se inclinó, pasó por arriba de una tranquera y muy cerca del mangrullo para la cámara de la tele donde había dos policías y el camarógrafo!!! hasta caer entre los arbustros, destruído. Impresionante.
Agustín shokeado (vale destacar de la manera que se bancó el auto semejante piña, manteniéndose la estructura y respondiendo la butaca, cinturones y medidas de seguridad), luego de recibir las primeras atenciones fue trasladado al hospital de Balcarce, allí luego de los estudios que le hicieron que no detectaron lesión alguna por suerte, retornó al autódromo y debió hacer reposo. Sobre la noche, autorizado, emprendió el regreso a Arrecifes. Atrás quedaba el tercer palo del año para el; en marzo corriendo en Top Race en Olavarría, fue chocado por otro auto y terminó en el hospital; en abril se clavó con el Chevrolet Vectra de TC 2000 contra un paredón del callejero de Santa Fe y también debió ser hospitalizado; esta vez le ocurrió en TC.
«Me quedé sin frenos en el final de la recta principal, cuando iba a unos 230 km/h, pasé el talud y las gomas y terminé cayendo del otro lado. Fue un golpe muy duro, me angustié mucho al darme cuenta que no respondieron los frenos, me asusté mucho; la verdad tengo que estar agradecido a la vida, la saqué muy barata, en ese momento pensé que se terminaba mi capítulo, pensé lo peor», contó Agustín. «No, no pienso en que me dí la tercera piña del año; son cosas de las carreraw. En Olavarría me chocaron, en Santa Fe se sabe que los paredones están muy cerca y esta vez algo pasó en el auto; insisto, son cosas de las carreras», dijo convencido.
Foto AIF
Por C.S (especial desde Balcarce)