MIREN QUE SE HABLA del relato oficial, el del gobierno.
Bueh!, en el Turismo Carretera también.
Hace unos días, durante unas tres horas se reunieron en la ACTC, la cúpula directiva, gente del área técnica, del Automovilismo para Todos y también expertos en comunicación.
¿Para que?.
A nadie se le escapa el rebote tan negativo producido por medidas como las modificaciones reglamentarias, en parte del ambiente de la categoría y lo que más ha preocupado, las consecuencias en el humor de la gran masa de público seguidora del TC, aunque se escuche que en lo más alto del poder ni siquiera causó picazón…
Las modificaciones técnicas en plena etapa de definiciones, inoportunos, teñidas de desprolijidad ayudaron a convocar, otra vez, a los fantasmas y han atraído suspicacias que tanto se ocupan por desterrar desde la dirigencia.
En la mentada reunión pudo haberse trazado estrategias para elaborar un relato común, con pretensiones de salir a enfrentar el cúmulo de informaciones y opiniones adversas, por cierto en la mayoría de los casos, fundadas.
En la elaboración del relato también ha sido contemplada la postura de los actores principales, ya sea pilotos, técnicos, responsables de equipos e incluso el importante sector de la prensa que no va en línea como otro, con las posturas de la calle Bogotá. En este sentido, ¿existe intención de monitorear a los medios «díscolos»?.
Sobre las opiniones contrarias a las modificaciones, sabés que chevroletistas con Matías Rossi a la cabeza, Christian Ledesma, Leonel Pernía, entre los de mayor peso específico; el constructor Alberto Canapino, han sido particularmente críticos al referirse al retoque reglamentario I y al retoque II. Ni hablar Miguel Herceg. El Polaco es uno de los grandes hacedores técnicos en la frondosa historia del TC, desde los años ´60 cuando empezó con fierros para el Chevrolet de Jorge Cupeiro, hasta hacer pata ancha y cansarse de ganar con los Falcon oficiales de Pirín Gradassi, el Turco Nasif Estéfano y un tal Juan María Traverso hasta abrir el abanico y resultar el maestro de quienes más tarde, se convirtieran en exitosos preparadores hasta el día de la fecha.
El Polaco en declaraciones en la radio al programa Carburando, se despachó en contra de las modificaciones aplicadas, consideró que pudieron efectuarse a costos considerablemente inferiores sin verse obligados motoristas a gastar «40 mil pesos». Y después la remató al decir que el block del motor Chevrolet de Rossi, (Fabio Martínez, figura como motorista del Granadero), es el mismo en su concepción al que le hiciera en 1994 al Flaco Traverso.
Así que ante el torbellino de opiniones críticas que hasta pueden exceder las originadas en los cambios instrumentados al reglamento, desde la ACTC habrían sugerido bajar los decibeles y que los actores se recluyan en la cautela y prudencia respecto a sus dichos. Acá también se ha apuntado a construir un relato único.
Foto gentileza ahorainfo.com.ar
Por C.S
hasta en esto al apt imita a carbu. a los pilotitos exacerbados, que les saquen el micrófono y no le enfoquen el auto.
POr favor.. basta del automovilismo para algunos pocos!!! Ya la mentira esta mostrada la $ se la lleva uno solo!! y lo transmiten el sabado por cable!!! no es que era para todos!!!basta!!
Yo no me olvido de guido
AUTOMOVILISMO PARA TODOS!! los giles que se creen esta farsa y los que seguimos mirando y no sabemos aun porque lo hacemos, mas conociendo la historia y padeciendo tener un ser querido sobre un auto, como es mi caso. Y PLATA PARA UNOS POCOS!! amigos del poder que hacen reglamento a pedido del inepto de turno que nos muestra autitos de color y nos enseña seguridad vial… y que ademas ni siquiera fue votado. Hoy me parece que el Turismo carretera se murio con Deambrosi, se accidento en la ruta y fue finalmente liquidado cuando le extirparon los acompañantes. Esta farsa deberia ya tomar nombre propio eso si no deberian olvidar la sigla del final S.A. que llevan casi todas las empresas con fines de lucro… Y alguien del ente rector deberia tomar las riendas y hacer una categoria para hombres con autos veloces y con potencia, y dejar estos excaletriz para que jueguen los chicos.