NO SE TRATA DE LA CONOCIDA CONSIGNA POLÍTICA.
Es de imaginar, que a su manera Valentín Aguirre sin grandes exteriorizaciones como ya se lo conoce, hasta casi imperturbable, pueda pensar acerca de ganar el campeonato de Turismo Carretera 2019, en el que se ha colocado luego de la victoria santiagueña, quinto con 198,50 unidades. El calendario ha dejado atrás en Termas de Rio Hondo, siete de las quince fechas fijadas, sin que aparezcan sólidos los habituales candidatos a campeones, las figuras más conocidas y reconocidas.
En cambio han aflorado y se mantienen los pilotos con atributos y proyección a futuro en el planeta TC. Aguirre ganador por primera vez en marzo en Neuquén, uno de ellos; 22 años, 22 carreras en TC, dos triunfos. Ha venido mostrándose consistente bien acompañado por el Dodge del JP Carrera. Manuel Urcera en el Chevrolet, sigue al frente de las posiciones y no da la impresión que vaya a «caerse», de tal manera de arribar al Coronación como local en diciembre en Neuquén. Llegó quinto en Termas luego de una apretada pelea con Matías Rossi, el Misil le ganó la posición con justa maniobra.
¿Otros nombres?, la visita a Termas donde el TC corrió en el mismo circuito utilizado para el Gran Premio de Argentina de MotoGP, dejó 11º a Leonel Pernía; el Tanito en el Torino escolta a Urcera (261 puntos) con 208,50; diferencia poco acostumbrada en la categoría. También triunfador primerizo en 2019, Santiago Mangoni apoyado en el Chevrolet armado por un equipo con apenas un par de colaboradores y la billetera flaca, tercero en pista se ubica en la misma posición en el puntaje, 203 puntos. Uno más que Facundo Ardusso, primero de los que han peleado los últimos campeonatos, en la actual temporada sin la consistencia conocida su Toro oficial.
De los apellidos de peso, anotá a Mariano Werner (el cardán del Ford lo sacó de carrera cuando iba tercero), sexto en el puntaje (190), Guillermo Ortelli (tampoco llegó) séptimo (182) sin que su Chevrolet también del JP, se note con el rendimiento del de Urcera o la Dodge de Aguirre. Sigamos anotando, candidatazo por antecedentes y resultados, Rossi (cuarto puesto), 11º en el campeonato (161); su Ford rinde pero no deja plenamente conforme al Misil. ¿Y el campeón Agustín Canapino?, alejado de la cima, 145,50 puntos (17º), en un ejercicio opaco que apostaron lograrían revertirlo con la Chevy nueva. En Termas vio como ganaba Aguirre desde el box; en la vuelta 10, Juan Cruz Benvenuti lo tocó a Nicolás González al ingreso de una curva, llevó a que los autos que iban atrás se apretaran, eso llevó a que Spataro se enganchara con Christian Ledesma, lo que hizo que la trompa y el radiador de agua se dañara.
El resto de conocidos y frecuentes pretendientes a la corona, inmersos en la intrascendencia. Acordate, han pasado siete de 15 carreras, más allá que el TC y su tan particular puntaje y los porotos extras que otorga el Coronación, casi todo lo pueden hacer posible…
Atrás quedó el paso por Termas, el «mejor circuito del país», que en un domingo en el que se apagó el país, el escenario desnudó falencias ante repentinos e imprevistos inconvenientes como la falta de luz que padeció casi toda la Argentina. Tanto que la ACTC apuntaló la carrera con un grupo electrógeno propio que dicho sea de paso, no alcanzó para cubrir las necesidades imperiosas de enviados de medios de prensa que padecieron para efectuar el trabajo. En fin.
(Especial desde Termas de Río Hondo).
Fotos: ACTC
A ledesma lo tiro a la mierda Spataro, no Canapino.