“INVITADOS DE LUJOS”.

Así definió Rubén Salerno, desde su lugar de director deportivo, a los invitados que convocó  para compartir con sus pilotos titulares los Peugeot 408 de la Escudería FE. Vaya si lo son. Hay un ex Fórmula 1, como  Esteban Tuero, el argentino que hasta hace poco, más cerca estuvo de la Máxima, Facundo Regalia; un experimentado  que eligió estos 200 Km de Buenos Aires del Súper TC 2000, para reaparecer y retirarse como Oscar Fineschi, y esa frutilla del postre que es la presencia del holandés Tom Coronel, único europeo participante en los 200.

"Siempre me interesa venir a correr en Argentina" le dijo Coronel a Visión.

“Oh, no…”,contestó Tom con esa sonrisa y expresividad, que son una marca registrada en su extrovertida personalidad, ante la pregunta de  Visión, sobre si toma esta primera participación en los 200 Km de Buenos Aires, como una prolongación de esas vacaciones que días atrás inició en Hawai con su familia. “El único problema fue convencer a mi mujer de acortar las vacaciones, je…”, comentó el holandés de 44 años, con una sonrisa, antes de  contar que “con Salerno comenzamos las conversaciones cuando él vino a una carrera en Nurburgring. Siempre me interesó correr en Súper TC 2000, porque me gustan ese tipo de autos y la considero la mejor categoría de Sudamérica. También me entusiasmó la idea de volver a la Argentina, donde tengo amigos como Norberto Fontana, y además la gente vive con mucha pasión las carreras”.

Coronel comparte el Peugeot 408 con el chubutense, Luciano Farroni,  «lo ubicamos con Farroni  porque su ingeniero de pista es Sebastian Martino, quien conoce a Coronel  de su paso por el automovilismo europeo, y además es quien sabe inglés, por lo tanto puede comunicarse mejor”,  le contó Salerno a VA sobre la forma que se integró este especial binomio argentino-holandés. “Lucas Benamo fue el primero en arreglar con Tuero, lo mismo pasó con Javier Manta con Fineschi, y así para Regalia quedó Lucas Colombo Russell”,  agregó el director de la Escudería FE sobre las integraciones de las otras parejas.

Titulares e invitados de lal Escudería FE junto a su director Rubén Salerno.

 

Los 200 Km no es la única carrera para Coronel en esta visita a la Argentina. El primer fin de semana de agosto sobre un Chevrolet Cruze corre en Río Hondo  la fecha del Campeonato Mundial de Turismo (WTCC). La categoría lo tiene entre sus principales protagonistas (ganó en Marruecos y Portugal), y como uno de los rivales de su amigo José María López. “Ahí es distinto porque conozco la categoría desde hace varios años. Obviamente las dos carreras las encararé con todo el profesionalismo, pero tengo que poner más energía en los 200 Km que en el WTCC, porque son muchas cosas nuevas. La categoría, el auto, el circuito, el compañero. No me quejo, porque es un lindo desafío y me gustan los desafíos. No imagino que pueda ganar, pero sí, que voy a disfrutar.

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—¿Y en el WTCC podés ganar?

—Y voy  a intentarlo. El lastre que cargaron los Citroen abrió chances a las otras marcas, pero igualmente siguen marcando una diferencia, aunque no tanto como el año pasado. Igual no creo que Pechito tenga problemas para lograr su tercer título.

Coronel vino a correr Súper TC 2000 y WTCC pero lleva en su celular la imagen del buggie en construcción para el próximo Dakar.

 

—El año que viene ya no lo vas a tener como rival porque deja el WTCC por la Fórmula E. ¿Te parece una buena decisión de Pechito?

—Sí, porque Pechito ya no tiene más nada que demostrar en el WTCC. Por el contrario, si seguía era más lo que tenía que perder que ganar. Además es importante el hecho que continúe junto a una marca como Citroen, y resulta lógico que busque nuevos desafíos. Y si bien lo veo con buenas posibilidades en la Fórmula E, creo que tarde o temprano  veremos a Pechito sobre un Toyota del Mundial de Resistencia. Ojalá su partida no deje al WTCC sin pilotos argentinos, sería bueno que viniese otro porque los argentinos se destacan por su capacidad y profesionalismo.

—¿Y tu futuro, cómo viene?

—Me gustaría seguir en el WTCC pero como no soy un piloto oficial de una marca, tengo que hacer todas las gestiones para poder correr y eso no es fácil. Lo que sí tengo seguro es mi participación en el Dakar con mi hermano Tim. Estamos trabajando mucho en el armado de los buggies. Por un momento pienso que somos unos locos al trabajar durante todo un año para correr quince días, pero lo hacemos y nuestra satisfacción será ver que por primera vez  los dos podamos dar la vuelta y terminar el Dakar.

Tom Coronel, el invitado especial de los invitados de lujo de la Escudería FE.

 

Por Miguel Sebastián

Fotos: Mónica Paz

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