POR DUPLICADO Y ANTICIPADO.
No necesitaba Jorge Barrio confirmar con su segundo título consecutivo en la Fórmula Renault 2,0 su condición de gran promesa del automovilismo argentino. Menos en una temporada en que ya había dado el paso siguiente con su llegada al TC 2000 y encima se quedó con la corona.
“No iba a correr este año en la Fórmula Renault pero finalmente decidí hacerlo porque me lo pídió el equipo” le contaba Barrrio a visionauto en el inicio de la temporada sobre un actitud, que además del agradecimiento al Croizet Racing (su equipo), buscó sumar al menos un aporte a las flacas grillas de la categoría, que lamentablemente siguieron sin sobrepasar los 15/16 autos. La gran esperanza de un incremento está puesta en el retorno de los chasis Crespi que desde el 2022 podrán convivir con los actuales Tito. Una justa reivindicación para un arbitrario desplazamiento a fines del 2006 que derivó en este flojo presente de la categoría.
Lejos estuvo Jorgito Barrio de correr para hacer número. Fiel a su estirpe de estirpe de piloto de raza y el ímpetu de un chico de 17 años, corrió para ganar. Y ganó 10 carreras, casi todas las domingueras largadas por el orden clasificatorio, para celebrar en el Oscar Cabalén un anticipado bicampeonato y recibir entre las muchas la felicitaciones, la de Dario Ramonda, su futuro jefe deportivo en el equipo Toyota de Súper TC 2000.
Acorde a estos tiempos de ascenso vertiginosos, estaba olvidada la conquista de un bicampeonato consecutivo en la categoría denominada escuela. Para encontrar el último antecedente hay que retroceder a las temporadas 2006/2007 con las coronaciones del hoy consagrado Mariano Werner. Años atrás habían obtenido títulos consecutivos Rafael Morgenstern (2001/2002), Omar Martínez (1990/1991) y Miguel Angel Guerra (1974/1975).
Jorge Barrio se ha incorporado a esta selecta galería al mismo tiempo que inauguró otra en la que tal vez quede como habitante exclusivo: ser campeón de Fórmula Renault y TC 2000 en la misma temporada con apenas 17 años. Está claro que es un chico destinado a escribir nuevas y mayores historias en el automovilismo argentino.